El alcance del ciberataque al Hospital Clínic de Barcelona, uno de los más grandes de Catalunya, se ha manifestado este lunes en forma de consultas y operaciones canceladas o derivadas. 24 horas después de recibir el ataque a su sistema informático, el centro ya ha desprogramado 150 cirugías no urgentes, 3.000 visitas a consultas externas y entre 400 y 500 extracciones. También se han aplazado sesiones de radioterapia oncológica.
De cara a este martes, el centro de extracciones y la radioterapia oncológica continuarán aplazando visitas y se enviarán a otros centros los códigos urgentes como los infartos o los ictus. En cambio, empezarán a recuperarse en parte otras áreas del hospital y se retomarán un 10% de las consultas externas. Los pacientes que sí puedan ser visitados recibirán una llamada del hospital, mientras que el resto de visitas se reprogramarán.
També se recuperará entre el 40% y el 50% de la actividad quirúrgica en la sede de Villarroel. El criterio para retomar la actividad, según ha informado la Generalitat, han sido la “máxima seguridad” del paciente. No hay plazo para conseguir la plena normalidad y la previsión es que se haga de forma progresiva.
Este martes también se mantendrán las hospitalizaciones urgentes, las domiciliarias, la radiología, las pruebas endoscópicas y la farmacia ambulatoria.
El director médico del Hospital Clínic, Antoni Castells, ha admitido que por ahora es “imposible” saber cuándo se podrán recuperar todos los servicios. Por ahora, trabajan en colaboración con Mossos d'Esquadra y la Interpol.
Según la Agencia de Ciberseguridad de Catalunya, el ciberataque es “complejo” y proviene de fuera de España. La autora es la organización de cibercrimen llamada 'Ramson House', aseguran, con la que no ha establecido ningún contacto y a la que no piensan pagar “ni un céntimo”. Tomàs Roy, director de la Agencia, ha asegurado que se trata de un “ataque complejo, que no sigue el 'modus operandi' clásico y que incluye técnicas nuevas”, por lo que aún están estudiando el alcance de los daño.
Se trata de un ciberchantaje, un tipo de virus que cifra los archivos del ordenador, bloqueándolos, y que pide después un rescate para liberarlos. Informáticos trabajan para volver a la normalidad, si bien la Generalitat no ha puesto plazo para ello. Este domingo el hospital informó que se habían visto afectados los servicios de laboratorio, farmacia y urgencias. Y que se derivaría a nuevos pacientes a otros hospitales, sobre todo los códigos de ictus o infarto.
A papel y bolígrafo y sin 'quimios' programadas
Este lunes ha sido caótico para la mayoría de profesionales del Clínic, que han tenido que recurrir a papel y bolígrafo para actualizar los historiales clínicos de sus pacientes, debido a que la base de datos informática SAP es la que no funciona. “Todas las valoraciones diarias las estamos registrando en papel”, asegura un médico del hospital.
Castells ha informado de que el centro dispone de un plan de contingencia que permite trabajar “muchos días” con las condiciones actuales. Pero aun así son muchos los impedimentos a los que se enfrentan los profesionales. “No podemos acceder a los antecedentes médicos, a los diagnósticos, pruebas hechas, analíticas… Está todo informatizado”, advierte un facultativo del hospital.
Ante este escenario, el mismo médico asegura que la actividad que queda más afectada es la de consultas externas. En cuanto a los 800 pacientes hospitalizados, pese a la falta de información, enfermeras y médicos pueden seguir tomando decisiones y ajustando la medicación, por ejemplo. Pero en consultas ambulatorias, no. “Yo no puedo ver ahora mismo quién tiene cita para visitarse mañana; ni su historial”, resume el facultativo. Esto afecta a también a pacientes que tienen programadas sesiones de quimioterapia ambulatoria.
La actividad paralizada afecta a las tres sedes del Clínic (Villarroel, Plató y Maternitat) y el consorcio de centros de primaria CAPSBE, que incluye los CAP Casanova, Borrell y Les Corts. El director médico del Clínic ha indicado que, como los procedimientos van más lentos, desde este domingo el transporte sanitario deriva casos de baja complejidad a los Centros de Urgencias de Atención Primaria (CUAP) y los más graves a otros hospitales cercanos, si bien se siguen atendiendo a pacientes que llegan por su pie a Urgencias.
En Catalunya se producen cada año alrededor de 1.700 millones de ataques, el 98% de los cuales se bloquean, por lo que son unos 2.000 los que constituyen problemas de seguridad. Uno de lo más graves fue el registrado por la Universitat Autònoma de Barcelona en octubre de 2021, un apagón informático que afectó a sus docentes y estudiantes durante más de una semana.