El cabeza de lista de JxCat, Jordi Sànchez, ha apuntalado este jueves que para facilitar una investidura su formación reclamará que se acepte una mesa de diálogo con las fuerzas catalanas en la que se pueda debatir del referéndum de autodeterminación como una de las opciones. Así lo ha explicado en la rueda de prensa que ha ofrecido desde la prisión de Soto del Real en 'streaming' para la agencia EFE, que había sido autorizada por la Junta Electoral Central este mismo miércoles por la noche.
El candidato ha indicado que JxCat no dará “cheques en blanco” y que la condición para tener sus votos será obtener “un compromiso por parte de Sánchez para encontrar una solución que pase por el referéndum”. Sin embargo, ha descartado que la condición sea que el PSOE acepte la autodeterminación, ni mucho menos que esa sea una línea roja. “Nosotros no impondremos la solución antes del diálogo, pero tampoco dejaremos que nadie imponga su solución”, ha asegurado Sànchez, rebajado de esta forma las palabras de Carles Puigdemont y de la número dos de la lista, Laura Borràs.
Sobre la negativa reiterada del PSOE a aceptar un debate sobre el referéndum, Sànchez ha indicado que “en una campaña se dicen muchas cosas que después no se pueden cumplir”. En esta línea el candidato de JxCat ha asegurado que las “líneas rojas” que han venido poniendo diferentes partidos, ha opinado, solo sirven para “bloquear” una “solución democrática para Catalunya”, que es el objetivo que su formación perseguirá en el Congreso. “Si Pedro Sánchez no acepta este diálogo será el que tendrá que explicar por qué”, ha remachado.
Sànchez se ha mostrado además confiado en que el presidente Pedro Sánchez relajará su discurso sobre Catalunya “una vez pasen los nervios electorales”. En opinión del candidato, lo que se juega en estas elecciones es “quién se sienta en la mesa con el PSOE y con qué fuerza”, por lo cuál ha reclamado que su formación consiga una fuerza excepcional. “Cuando votéis pensad en nosotros. Yo estaré allí. Estaremos defendiendo todos los derechos y buscando un acuerdo”, ha asegurado.
Jordi Sànchez ha hablado también de sus planes para el siguiente periodo político, que muy probablemente encarará desde la cárcel. Por un lado ha indicado que su compromiso con el Congreso es total, por lo que tiene previsto dejar el acta de diputado en el Parlament de Catalunya. “Espero ocupar mi escaño en el Congreso, junto con Laura Borràs y el resto de compañeros”, ha indicado Sànchez.
Aunque el candidato ha querido soslayar temas como su encarcelamiento o la marcha del juicio en el Tribunal Supremo, recordando que ofrecía la rueda de prensa en calidad de candidato de una lista electoral, Sànchez sí se ha acabado refiriendo a un posible indulto. Un punto que aparece en el programa electoral de JxCat y sobre el que candidato ha asegurado que es un tema que deberá valorar su abogados. “La defensa ya ha puesto sobre la mesa que este juicio solo puede acabar con una absolución”, ha apuntado.
La rueda de prensa de Sànchez desde la prisión ha supuesto un evento inesperado en la campaña de las generales, al haber sido autorizada por la Junta Electoral a menos de 12 horas para que se celebrara. En las últimas sesiones, el tribunal ha abierto la mano sensiblemente a las peticiones que los presos independentistas habían reclamado para hacer valer sus derechos políticos y poder hacer campaña.
A Sànchez, además de la rueda de prensa de este jueves, se le ha permitido responder a otra ronda de preguntas el próximo domingo 21 en la agencia ACN. Otros compañeros de candidatura, como Jordi Turull o Josep Rull, también han sido autorizados a realizar entrevistas en medios, mientras que el líder de ERC Oriol Junqueras también podrá realizar una rueda de prensa, este mismo viernes, y participará en actos por vía telemática.