La portada de mañana
Acceder
España tiene más de un millón de viviendas en manos de grandes propietarios
La Confederación lanzó un ultimátum para aprobar parte del proyecto del Poyo
OPINIÓN | Aldama, bomba de racimo, por Antón Losada

El mosso que se cruzó con el terrorista de la Rambla tras el atentado: “Tenía cara de satisfacción”

Tras empezar la semana con el chalé de los terroristas en Alcanar, la sesión de este miércoles del juicio por los atentados de Barcelona y Cambrils ha vuelto a la Rambla. La furgoneta con la que Younes Abouyaaqoub segó la vida a 14 personas y su huida por las calles del centro de la ciudad han copado la jornada, en la que ha destacado el testimonio de un agente de los Mossos d'Esquadra que se cruzó con el joven terrorista de Ripoll minutos después de los ataques, cuando todo era confusión y miedo alrededor de la Rambla. “Tenía cara de satisfacción y sobreexcitación”, ha explicado el agente.

El relato de este mosso d'esquadra ha puesto voz a los vídeos que por primera vez el tribunal de la Audiencia Nacional ha mostrado a las partes. Se trata de las grabaciones del que las cámaras de tráfico y de varias tiendas de la Rambla hicieron del atropello y la posterior huida a pie de Abouyaaqoub. También se han exhibido imágenes del cadáver del terrorista tras ser abatido cinco días después por los Mossos. Los vídeos estaban custodiados en el juzgado porque el juez instructor había decidido no divulgarlos a las partes para no ofender a las víctimas.

Las miradas entre Abouyaaqoub y el mosso se cruzaron en la plaza de la Gardunya, al lado del mercado de la Boqueria, minutos después de los ataques. “Vi a un hombre de origen árabe que llevaba un polo de rayas”, ha recordado el agente. Mientras la gente corría y huía del lugar de los ataques, ha recordado el policía, Abouyaaqoub “se paró y miró la escena con cara de satisfacción y sobreexcitación”. Luego continuó su huida por la calle del Carme.

El trabajo de los Mossos ha permitido reconstruir la huida del terrorista. Pasó por el patio del CCCB y la Universidad Ramon Llull en el Raval, y siguió por el Eixample recorriendo las calles Casanova y la Gran Via. Subió por la calle Entença, por delante de la prisión Modelo en su camino para salir de Barcelona. Asesinó al joven Pau Pérez en el 'parking' de la Universidad de Barcelona en la Diagonal, le robó el coche y arrolló el control policial que se había montado tras los atentados en las salidas de la capital catalana.

Luego abandonó el turismo en Sant Just Desvern, en los aledaños de Barcelona, y en ese momento desconectó un teléfono móvil robado que llevaba. Eran las 19:00h. de la tarde, apenas dos horas después de los ataques. Los mossos también han testificado que localizaron imágenes de Abouyaaqoub aquella misma tarde en un polígono industrial de Sant Just, pero que desde entonces se le pierde el rastro.

No fue hasta tres días después a las 22:30h. que el terrorista fue captado por las cámaras en una gasolinera de la N-340 en Cervelló (Barcelona), a unos 12 kilómetros de la capital, donde llegó caminando y con una bolsa de plástico en la mano. Llevaba una ropa distinta respecto el día 17 y removió un contenedor, probablemente buscando comida, según los agentes, e intentó abrir la puerta de una camioneta. Una hora más tarde reapareció en la misma gasolinera y volvió a remover el mismo contenedor.

Al día siguiente, poco después de las 10:00h. de la mañana, se le grabó en otra gasolinera de la misma N-340, en Sant Cugat Sesgarrigues, cerca de Vilafranca del Penedès, a unos 12 kilómetros de la anterior estación de servicio. Media hora más tarde fue grabado en un polígono industrial de San Pere Molanta, a un kilómetro y medio. Entre las 11:00h. y las 13:00h. estuvo un rato en la masía Ca ​​l'Escudé, de Subirats, a unos diez kilómetros, y dejó huellas dactilares ya que habría buscado comida.

Finalmente, el joven fugitivo fue localizado por una patrulla de Mossos en un camino de Subirats, a unos tres kilómetros de la masía, y allí mismo fue abatido tras mostrar un artefacto explosivo simulado. Eran las 15:00h. Los agentes que inspeccionaron la escena han relatado que encontraron unas gafas de sol y dos cuchillos de mesa al lado izquierdo del cadáver, y cerca del mismo una caja de cerillas y otro cuchillo, además de cuatro tubos de plástico, papel de aluminio y cables eléctricos. A unos metros de distancia, cerca de la carretera, hallaron media doce de proyectiles y 27 vainas percutidas.

Por otro lado, este miércoles han declarado varios agentes que inspeccionaron la furgoneta del imán de Ripoll Abdelbaki Es-Satty en Sant Carles de la Ràpita (Montsià), a una decena de kilómetros del chalé de Alcanar, el 21 de agosto. El vehículo estaba limpio y en buenas condiciones, y en su interior encontraron el pasaporte de Es-Satty, billetes de barco para ir a Marruecos semanas antes, gas pimienta y un mapa hecho a mano de varios puntos alrededor de Ripoll.