El voto por correo fue una de las principales apuestas de la Generalitat para descongestionar las mesas y garantizar que las personas más vulnerables pudieran participar en las elecciones del próximo 14 de febrero. Ahora, una vez acabada la fecha límite para reclamar el voto postal, las cifras son de récord: 284.706 personas tienen previsto ejercer su derecho al sufragio por correo, número que triplica las 78.876 solicitudes realizadas hace tres años. De las personas que lo han pedido, además, prácticamente la mitad han enviado ya su papeleta, mientras que el resto lo harán en los próximos días, pues tienen de plazo hasta el 12 de febrero.
La cifra alcanzada es además un récord si se compara también con otros procesos electorales. En Catalunya, el récord de voto por correo se había producido en las generales de 2016, pero entonces no se superaron las 200.000 peticiones, por lo que ahora la cifra se ha superado con creces. Respecto a las elecciones al Parlament, las solicitudes de voto por correo de los comicios de 2015 alcanzaron el número más alto, con 107.421 peticiones, mientras que en 2012 fueron 63.142 y, en 2010, se quedaron en 45.000.
Más allá de la cifra, en estas elecciones destaca también que, del número total de personas que han solicitado el voto por correo para el 14-F, cerca de un tercio lo han podido hacer de manera telemática, es decir, sin acudir a la oficina de correos, y por tanto sin ningún riesgo sanitario. Además, los votantes que hayan solicitado esta modalidad tendrán la opción de entregar el voto directamente al cartero, que será también quién lleve la documentación electoral al domicilio.
Desde la Generalitat resaltan el hecho de que el aumento de votantes por modalidad postal permitirá reducir la presencialidad en los colegios, lo que reducirá la afluencia, las posibles colas y los riesgos sanitarios. Desde la oficina de Procesos Electorales celebran que la recomendación realizada “haya tenido buena acogida entre la población”.