Ciudadanos y PP esquivan hablar de terrorismo tras la detención de una activista de los CDR
La orden de detención por delitos de rebelión y terrorismo contra dos activistas catalanes, que finalmente se ha quedado en una sola detención practicada, no ha estado acompañado por el relato político. Ni siquiera entre la esfera constitucionalista, que ha evitado posicionarse sobre la existencia de terrorismo independentista en Catalunya. A lo más que han llegado tanto los partidos como el propio Gobierno es a hablar de violencia o delitos.
El diputado de Ciudadanos Fernando de Páramo ha relacionado directamente la operación de la Guardia Civil con ataques a sus sedes, agresiones a cargos de su partido, insultos en la calle o señalamientos que, según ha afirmado, se están produciendo. Sin embargo, preguntado por si considera que esos actos son terrorismo, De Páramo se ha puesto de lado diciendo:“Yo no voy a entrar en ese marco del terrorismo, no voy a hacer valoraciones en ese sentido y mucho menos en temas tan sensibles sobre los que además desgraciadamente en este país tenemos muchos casos”.
Según lo expresado por el principal grupo en el Parlament, la existencia o no de terrorismo “es una decisión de los jueces y de la investigación policial”, no de partidos o particulares. Ciudadanos sí ha dejado claro, sin necesidad de previo pronunciamiento togado, que ellos consideran que han sido objeto de la violencia, reclamando que la Cámara catalana la condene.
Guardando igualmente cautela y respeto ante las actuaciones judiciales, el PSC sí ha entrado a opinar sobre la existencia de terrorismo independentista en Catalunya. “No vemos motivos para utilizar la legislación antiterrorista contra los CDR”, ha asegurado la portavoz Eva Granados. La socialista también ha denunciado la existencia de acciones de violencia aunque, para su formación, no imputable a delitos de terrorismo ni de rebelión.
“Nosotros rechazamos las actuaciones de los CDR y consideramos que algunas de ellas pueden ser delito, pero hay algunas figuras jurídicas que hay que ser especialmente cuidadosos a la hora de aplicarlas”, ha indicado la portavoz. Granados trazaba así, tras las detenciones por terrorismo, un cambio sustancial con el posicionamiento de su partido hace solo una semana, cuando el secretario de organización consideró que los CDR llevaban a cabo actos insurreccionales y habló de un posible “conflicto civil”.
Pese a que la idea de la violencia independentista ha sido ampliamente aceptado entre los partidos constitucionalistas desde que la Fiscalía interpusiera la querella por rebelión contra los miembros cesados del Govern, en octubre pasado, la supuesta existencia de terrorismo supone un paso más allá en la gravedad de esa violencia. Por esta razón, las fuerzas que no han negado directamente ese terrorismo también han optado por no afirmar su existencia.
Pero ni siquiera el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha querido hablar de terrorismo en la entrevista que este martes ha concedido desde el plató del Programa de Ana Rosa, mientras la operación coordinada entre la Guardia Civil y los Mossos tenía lugar. Como los partidos, el ministro ha preferido hablar de la existencia de violencia. Al parecer del político, los CDR tienen un carácter “violento” y ha destacado de ellos que son “similares a los comités de defensa cubanos”.
Pese a asegurar que tienen constancia de diversos actos violentos de los CDR, ya desde hace cerca de medio año, y con la detención por terrorismo y rebelión recién efectuada, el máximo responsable de las fuerzas de seguridad ha esquivado aportar datos relevantes sobre la comisión o preparación de atentados o actos terroristas.