La cumbre bilateral que el Govern ha propuesto desde que el Gobierno central confirmara su presencia en Barcelona el próximo viernes está más cerca, aunque para ello la parte catalana ha debido rebajarla al formato 'mini'. Esa es la última propuesta de la Generalitat, a la espera de respuesta por parte de la Moncloa: una minicumbre que reúna a tres ministros y tres consellers, además de los dos jefes del ejecutivo.
Ocho personas en total y con un orden del día que deberá ser pactado. Fuentes de la Generalitat indican además que el día más probable si se acaba celebrando el encuentro sería el jueves, un día antes del Consejo de Ministras, aunque por el momento “todo está abierto” y el contacto es “permanente” entre ambos Ejecutivos.
Los cimientos para que la reunión se acabe produciendo se sentaron este lunes, cuando la vicepresidenta Carmen Calvo se vio en Barcelona con el vicepresident Pere Aragonès y la portavoz del Govern, Elsa Artadi. Allí el Govern insistió en la reunión de “gobierno a gobierno”. En ese punto, según fuentes de la Generalitat, el Gobierno habría propuesto que los responsables de carteras ministeriales pudieran verse con su consellers homólogos, opción que el Govern también rechazó. Con todo, según subrayan, desde el Palau también sugirieron opciones alternativas aunque cercanas al formato de la cumbre.
A la espera de que la Moncloa confirme si finalmente acepta la última fórmula propuesta o alguna similar, el equipo de Torra ultima la composición de su delegación, en la que estarían los citados Aragonès y Artadi, además de la consellera de Justicia, Ester Capella. Por parte del Gobierno también suenan como seguras la vicepresidenta Calvo y la ministra de Función Pública y Administraciones Territoriales, Meritxell Batet. Pero cualquier nombre puede cambiar dependiendo de la fórmula que se acabe imponiendo, indica la Generalitat.
El Gobierno de Sánchez ha abierto la puerta en los últimos días a mantener un encuentro en esos términos, aunque por el momento no lo da por confirmado. Hasta ahora Moncloa se había limitado a ofrecer una reunión bilateral entre presidentes, como la que mantuvo Sánchez con Susana Díaz cuando el Consejo de Ministras se reunió en Sevilla. Hasta este lunes esa era la única fórmula válida para el Ejecutivo central.
Sin embargo, esa posición se modificó este lunes tras la reunión de Carmen Calvo con los consellers. “La vicepresidenta lleva tiempo trabajando para que la reunión se realice y salga bien porque eso es mejor para todos”, señalaban desde vicepresidencia las mismas fuentes que unos días antes aseguraban que la reunión sería exclusivamente entre los jefes del Ejecutivo.
Carmen Calvo ha dejado entrever en una entrevista en la Cadena Ser que al encuentro de Sánchez y Torra podrían sumarse otros miembros de los gobiernos, aunque no ha aclarado en qué formato, si en paralelo o todos juntos. “No hay ningún problema que nos podamos encontrar algún que otro miembro de ambos gobiernos porque lo que necesitamos en Catalunya es dialogar”, ha expresado.
Fuentes de Moncloa no descartan una reunión con más miembros, pero no confirman que vaya a ser en los términos que plantea la Generalitat. Tampoco dicen nada, por el momento, sobre quiénes serían los posibles asistentes, aunque la vicepresidenta y Meritxell Batet estarían en la terna. “Ya que estamos alli hay que aprovechar para que la política se abra paso”, señalan esas fuentes, que admiten las “circunstancias especiales de Catalunya”.
Desde vicepresidencia tratan de restar importancia al hecho de que Calvo se reúna junto a Sánchez con el Govern ya que mantiene una relación fluida con Artadi y Aragonès, con quien se ha visto en varias ocasiones. No obstante, hasta ahora en Moncloa descartaban un formato que no fuera idéntico al de Sevilla. “El formato que avala el Gobierno es la reunión entre los dos presidentes y ninguna otra”, dijo el viernes la portavoz del Consejo de Ministras, Isabel Celaá.