El president de la Generalitat cesado, Carles Puigdemont, ha respondido este miércoles a la publicación de los mensajes que envió al exconseller Toni Comín el martes, en los que se mostraba abatido por la suspensión del pleno y aseguraba: “Nos han sacrificado los nuestros”.
En un mensaje desde su cuenta personal de Twitter Puigdemont ha respondido este miércoles: “Soy periodista y siempre he entendido que hay límites, como la privacidad, que nunca se han de violar. Soy humano y hay momentos en los que también dudo”, ha reconocido, pero también ha asegurado que no se “echará atrás por respeto, agradecimiento y compromiso con los ciudadanos y el país”.
Con este mensaje Puigdemont reconocía que los mensajes eran suyos, algo que desde el grupo parlamentaria se ha puesto en duda tras su publicación por parte de Telecinco, pero reforzaba la idea del “mal momento” pasado por el candidato el martes por la tarde, con la que fuentes de su entorno habían justificado los mensajes.
También el exconseller Toni Comín, receptor de los mensajes, ha hablado del episodio desde su cuenta personal en redes sociales. “La revelación de secretos es delito en España y Bélgica”, ha asegurado, anunciando que emprenderá acciones legales. “A parte de que cualquier mensaje sacado de su contexto pierde siempre su significado”, ha comentado. Comín también considera que “la posición política del president” es la manifestada en el mensaje oficial.
Fuentes cercanas a Comín han confirmado que el diputado de ERC se querellará contra la cadena Telecinco por difundir los mensajes que le envió el expresident de la Generalitat. El equipo de El programa de Ana Rosa grabó el teléfono de Comín, sin su consentimiento, en un acto en Lovaina (Bélgica). El exconseller empezó a recibir mensajes de Puigdemont en los que el expresident asegura que viven “los últimos días de la República catalana”, que “el plan de Moncloa ha triunfa” o que los suyos les han “traicionado”.