El major de los Mossos d'Esquadra Josep Lluís Trapero empezó a trazar su línea de defensa en en el Tribunal Supremo y la ha mantenido en el escrito que este lunes ha presentado ante la Audiencia Nacional para responder a los once años de cárcel por rebelión que le pide la Fiscalía. El major ha alegado que se opuso al 1-O, que cumplió la orden judicial para impedirlo y que incluso intentó evitarlo instando a Carles Puigdemont y al Govern a “cumplir con la legalidad” suspendiendo la votación.
“El major Trapero ha desarrollado siempre su actuación profesional al mando del Cuerpo de Mossos d'Esquadra desde el más riguroso respeto al orden jurídico constitucional, obedeciendo y cumpliendo los mandatos judiciales y del ministerio fiscal”, afirma la letrada del major, Olga Tubau, en su escrito de defensa presentado este martes ante la Audiencia Nacional.
Es más, Trapero se desmarca por completo del plan soberanista y asegura que “jamás ha puesto a los Mossos d'Esquadra al servicio de los intereses políticos secesionistas” y que no compartió el “plan ideado” por el Govern y el Parlament para la independencia. En consecuencia, agrega Trapero, permaneció “de forma inequívoca” al servicio de la Justicia, desmarcando al cuerpo policial de los “designios secesionistas”, y para probarlo recuerda que tras la DUI se puso “a disposición” de jueces y fiscales. En el escrito no concreta el plan para detener a Puigdemont del que habló en el Supremo.
El exjefe de los Mossos, que fue cesado a raíz de la activación del 155 de la Constitución, niega que el operativo de la policía catalana ante el 1-O buscara “enmascarar una pretendida y dolosa inacción policial” para que se celebrara el referéndum y responsabiliza del dispositivo al coronel Diego Pérez de los Cobos, exalto cargo del Ministerio de Interior designado para coordinarlo con el que el major mantiene un conflicto abierto por los hechos de octubre.
Trapero remarca, al contrario de lo que dijo Pérez de los Cobos, que el coordinador sabía con exactitud que el plan de los Mossos para el 1-O incluía en primer lugar una pareja de agentes en cada colegio (el denominado “binomio”) que requeriría de los antidisturbios de los tres cuerpos si no lograba cerrar el colegio. Así se lo trasladó la prefectura de la policía catalana en las reuniones de coordinación que se celebraron los días 28, 29 y 30 de septiembre.
El major insiste en que Pérez de los Cobos dio su visto bueno el plan. “Ni por el ahora General Pérez de los Cobos ni por ninguno de los mandos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional que asistieron a las mismas se manifestó que el binomio resultara inoperante ni insuficiente en aras a dar cumplimiento al mandato judicial del TSJC, ni tampoco se manifestó ninguna desconfianza respecto de la voluntad de cumplimiento por parte del major Trapero y de la Prefectura del Cuerpo de los Mossos d’Esquadra” al auto que ordenaba impedir el 1-O.
Pérez de los Cobos afirmó que se enteró del plan de los Mossos el 9 de octubre. Trapero indica además que fue Pérez de los Cobos quien se desvió del plan inicial previsto y dejó que la Policía y la Guardia Civil actuasen por su cuenta en los centros antes de que la policía autonómica se lo pidiera.