La Universitat Pompeu Fabra (UPF) ha dado este miércoles algunos detalles de la revisión de los protocolos de acoso que anunció tras destapar elDiario.es un caso de abuso de poder por parte de un catedrático de Farmacología a sus investigadoras. El anuncio, con el que la institución explica que buscará coordinarse con las demás universidades catalanas, llega después de una nueva investigación de este diario sobre trato abusivo por parte de otro catedrático de la entidad, Vicenç Navarro.
En ambos casos, el de Navarro y el del catedrático Rafael Maldonado, diversos estamentos de la universidad recibieron quejas durante años y no actuaron. De ahí que la institución, dirigida desde el pasado febrero por una nueva rectora, Laia de Nadal, se haya visto empujada a reexaminar los actuales mecanismos de denuncia y resolución de expedientes.
La Pompeu Fabra ha creado un grupo de trabajo con asesores externos que presentará sus conclusiones a mediados de mayo, para luego elevarlas al Consejo de Gobierno y que este órgano las valide. Pero lo más novedoso es que la institución buscará también la coordinación con las demás universidades públicas catalanas, a través de la asociación que las agrupa, la ACUP. Desde la Pompeu Fabra creen que es necesario un abordaje “conjunto”, dado que en los otros campus también han aflorado casos de acoso laboral o sexual en los últimos meses. Entre ellos, los desvelados también por este diario en otros dos centros, el de una reputada arqueóloga de la Universitat de Barcelona (UB) o el de un catedrático de Física de la Autónoma (UAB).
Hace unos meses la consejería de Universidades de la Generalitat aprobó una guía para gestionar las denuncias de acoso sexual en los campus, pero no existe algo parecido y reciente para las demás conductas afloradas recientemente como el acoso laboral o el abuso de poder. En cuanto a la UPF, su reglamento sobre maltrato psicológico es de 2007 y su última actualización, de este mismo año. Pero en el anuncio de la rectora se da a entender que la revisión será en esta ocasión más a fondo.
En un comunicado, avanzan algunos aspectos en los que incidirán. En primer lugar, modificar el sistema de instrucción de los expedientes, tanto los informativos como los disciplinarios, y también mejorar la difusión de los canales para presentar estas quejas y denuncias internas. Esto último preocupa en la institución puesto que muchas voces de alarma se desoyeron por el hecho de no ser consideradas como denuncias formales. Por otro lado, estudiarán recurrir a asesores externos en los procedimientos, “para que las personas implicadas puedan contar con acompañamiento independiente, tanto jurídico como psicológico”, apuntan.
Reacciones al caso de Navarro
Navarro, apartado de la UPF tras dos décadas de acoso y abuso hacia sus secretarias e investigadoras, no solo ha sido un reputado académico, sino que también ha tenido actividad mediática y política, esta última vinculada a Podemos y a la confluencia catalana de los comuns. A raíz de la investigación de elDiario.es, la formación catalana ha querido mostrar su “rechazo” a sus comportamientos.
Un portavoz de los comuns ha explicado que dentro de su espacio político no tuvieron constancia de que Navarro protagonizase este trato abusivo. En su caso, el catedrático cerró listas electorales en dos ocasiones (en las elecciones autonómicas de 2015 y en las generales de 2019) y llegó a integrar una candidatura interna a la dirección del partido, en 2017, pero nunca participó demasiado de la vida orgánica dentro del partido.
“A raíz de las informaciones, lamentamos y rechazamos esas prácticas y le damos toda la credibilidad y veracidad”, apunta un portavoz del partido. “Nadie debe tener comportamientos reprobables de este tipo”, añade. Asimismo, lamentan que la UPF no actuase hasta 2021, cuando ya había acumulado varias quejas verbales por parte de personal laboral de su centro adscrito.
Pero más que en los comuns, la figura de Navarro estuvo sobre todo vinculada a Podemos. Muy crítico con los recortes sociales y el papel de la banca en la crisis de hace quince años, el catedrático se convirtió en referente para la nueva formación y fue coautor de su primer programa económico. Además, entre 2017 y 2021 fue uno de los miembros el Consejo Ciudadano Estatal, su órgano amplio de dirección.
Pese a ello, desde Podemos han declinado hacer valoraciones sobre los abusos destapados.
Además de sus relaciones con Podemos, esta no fue la única opción política en la que participó Navarro. Antes fue cercano a la órbita del PSC. Era conocida su buena relación con muchos dirigentes socialistas. Posteriormente, en 2018, también asesoró como independiente al consejero de Salud de la Generalitat Toni Comín, entonces de ERC y ahora del círculo de Puigdemont, en políticas sanitarias.
Si tienes más datos sobre este u otros casos de acoso en la universidad, puedes escribirnos a pistas@eldiario.es
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