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Torra amenaza a Sánchez con retirarle el apoyo en el Congreso si no negocia sobre autodeterminación antes de noviembre

Patear el balón hacia adelante puede no contar como pase pero vale como despeje. Eso es lo que ha hecho este martes el president de la Generalitat, Quim Torra, quien en medio de una tormenta política en Catalunya que cuestiona a su propio Govern ha emplazado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a iniciar un “diálogo político sobre la autodeterminación” antes de este noviembre. De no aceptarlo, ha advertido Torra, “el independentismo no podrá garantizar ningún tipo de estabilidad” al actual Gobierno del PSOE.

Torra ha reclamado así a Sánchez a que explique y ponga en marcha su propuesta para Catalunya, aprovechando el discurso ofrecido ante el Parlament con motivo del Debate de Política General. A juicio de Torra, el tiempo de la reforma del Estatut “ha pasado”, y ahora lo que debe celebrarse es un referéndum de autodeterminación. “Ofrecemos al Estado la oportunidad de homologarse a democracias más avanzadas”, ha asegurado Torra, tras recordar el viaje de Sánchez a Canadá y poniendo el ejemplo de Quebec.

Pese al ofrecimiento, el jefe del Govern ha asegurado que, mientras no haya respuesta de Sánchez, él avanzará “para hacer efectiva la República”. “Les esperamos y les ofrecemos abandonar la unilateral ejercida mediante represión, cárcel y exilio. Si no, nosotros haremos nuestro camino”, ha indicado. De hecho, Torra ha anunciando la puesta en marcha del “Fòrum Cívic, Social i Constituent”, un proceso participativo –a falta de uno verdaderamente constituyente– con el que el Govern tiene intención de recoger la opinión ciudadana sobre cómo debe ser la República catalana.

Además de este foro, Torra ha anunciado la creación inminente de la Oficina de Derechos Civiles, que tendrá el encargo, entre otras cosas, de personar a la Generalitat en todas las causas de “persecución política” contra el independentismo, sin más definición por parte del president. Finalmente, Torra ha recordado que en esta primera parte de legislatura da especial importancia a la recuperación de las leyes suspendidas. Una tarea en la que ya se ha empezado a avanzar gracias al diálogo con el Gobierno del Estado, pero que ahora el Govern quiere calendarizar de forma más minuciosa.

Ante un pleno del Parlament que por la mañana había negado la suspensión de los diputados encarcelados y huidos, Torra ha sacado el plan de Gobierno presentado la semana pasada para repasar sus puntos más importantes. Entre ellos hay políticas sociales concretas, como el modelo educativo, sanitario, de vivienda o de protección social, algunos de los ámbitos en los que el president ha sacado pecho por la aceleración de la inversión en su menos de medio año al frente de la administración catalana.

“Este Govern de mandato republicano gobierna desde el primer día, porque el país tiene que levantar la persiana cada día”, ha afirmado, huyendo de las críticas que le acusan de centrarse en la independencia y dar poca importancia al resto de asuntos de la gestión. Con todo, Torra ha exhibido estas políticas como la razón por la que su Govern está convencido a constituir un Estado para Catalunya.

Torra ha recuperado además la idea de convertir las condenas contra los presos independentistas en el “punto de no retorno” hacia la independencia. “Si se les condena el Estado estará legitimando ante el mundo el derecho de Catalunya a la autodeterminación”, ha asegurado el president, quien consideraría esas condenas como la “causa justa” del independentismo. “El día de las sentencias, si son condenatorias, será el punto de inflexión de la legislatura”, ha advertido.

Rechazo de la violencia

Sobre los disturbios y las cargas policiales que se produjeron este lunes al final de la manifestación de las entidades, el president Quim Torra ha apuntado que el aniversario del 1-O se vio “dañado” por lo que ha descrito como “hechos aislados no representativos”. “El camino de la independencia no es este”, ha asegurado, “el 1-O se hizo a cara descubierta para que la autodeterminación no tiene nada que ocultar”.

Pese a estos hechos, que ha reclamado que no vuelvan a repetirse, Torra ha vuelto a reclamar “no ceder ni un milímetro” en la movilización. Además ha anunciado que el conseller del Interior, Miquel Buch, dará explicaciones sobre la actuación de los Mossos ante el Parlament a petición propia, un gesto con el que ha conseguido despejar las peticiones de dimisión que este mismo lunes se hicieron en la manifestación.