El ‘encantamiento quijotesco’ de observar las estrellas desde la Cueva de Montesinos
La Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel y también la Sierra del Segura, ambas en la provincia de Albacete, aspiran a ser reconocidas como ‘Destino Turístico Starlight’. Es decir, destinos ideales para la observación de las estrellas. El proyecto ya está en marcha, de manera conjunta, por parte de los dos grupos de acción local que trabajan en estas zonas colindantes de la provincia de Albacete.
Lo harán a través de las ayudas europeas de los FEDER, vinculadas a la Inversión Territorial Integrada (ITI) para financiar cuestiones como la señalización o la compra de telescopios, entre otras. Las ayudas, que esperan que puedan llegar a los 30.000 o 40.000 euros para toda la comarca, las gestionarán a través de la Mesa de Desarrollo Rural de la Diputación de Albacete.
“La colaboración caracteriza a los grupos de acción local y tenemos una casuística muy parecida a la Sierra del Segura. Trabajaremos en común”, dice Damián García, Damián García, presidente de SACAM, Grupo de desarrollo local de la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel.
En este grupo se integran 25 pueblos, pero no todos tienen las características necesarias para poner en marcha actividades de astroturismo. “Tenemos seis o siete lugares emblemáticos, muy bonitos y pintorescos, algunos en alturas a más de 1.400 metros”. Damián García destaca la belleza de la Sierra del Herrumblar, en Villapalacios, la ermita de Pinilla, una pedanía del municipio de Viveros, el paraje ‘Cabeza de los Santos’, en Vianos o el Alto de la Coronilla, en Peñascosa.
“Son espacios de monte, con mucha arboleda y en paisajes que tanto de día como de noche son más que interesantes para visitar. En ellos aprovechamos la altura y la falta de luminosidad”, que caracteriza a toda la comarca.
La cueva de Montesinos, leer al Quijote y observar el cielo
Otros lugares, como la Cueva de Montesinos, en Ossa de Montiel, suman lo literario. “Qué mejor que estar viendo las estrellas al lado de un lugar al que se dedica todo un capítulo de Don Quijote de La Mancha”.
Los grupos de Acción Local de esta zona de la provincia de Albacete contemplan el Astroturismo como una oportunidad. “Si hace diez o quince años le dices a alguien que va a venir mucha gente a ver las estrellas…Aquí todo el mundo viene a comer chorizo y morcilla. No se contemplaba como nicho económico”, reconoce Damián García. Las cosas han cambiado. La diversificación de la oferta turística vinculada al medio natural es un hecho.
De hecho, en la Sierra de Alcaraz miran al cielo por distintos motivos. En El Bonillo tienen instalados cuatro calibradores de satélite, vinculados a uno de los proyectos estrella del sector aeroespacial español, el satélite de observación terrestre PAZ.
La Sierra del Segura, cielos limpios en los que ya se fijó Pedro Duque
“Queremos certificarnos como Destino Starlight para poner en el mapa un recurso importante como es la observación de estrellas como complemento a la actual oferta turística en una zona que tiene unos cielos muy limpios”. Lo dice Rafael Fernández, gerente del Grupo de Acción Local de la Sierra del Segura.
Se trata de “dar alternativas a los empresarios” de la zona y “poder llenar de otros públicos la comarca”. En su caso, la experiencia ya la tienen en Nerpio que cuenta con un albergue de telescopios. Uno de los socios del proyecto es el actual ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque.
“Allí los telescopios se alquilan para poder observar el universo. Hay albergues similares en todo el mundo que observan en los distintos tramos horarios. Nerpio es uno de los mejores sitios para hacerlo”, explica.
La propuesta que la Sierra del Segura ha elevado a la Diputación de Albacete pasa no solo por conseguir la certificación sino habilitar algunas zonas de observación ligadas a miradores e incluso a casetas forestales. En Nerpio la idea pasa por llevar a los amantes de esta práctica al Mirador del Taibilla, en Yeste a la Microrreserva de El Ardal, en Riópar se quiere aprovechar la zona de ‘Riópar viejo’ y en Liétor aprovechar el observatorio astronómico que ya existe.
De forma paralela esta asociación prepara un proyecto de desarrollo de producto y experiencias turísticas. Liétor, Nerpio y Ayna ya celebran actividades vinculadas al astroturismo.
Ahora, la idea es convertir lo esporádica es “agrupar y facilitar al turista las experiencias de forma ordenada, aprovechando la marca Starlight” e implicar a los jóvenes de la zona “para que lo vean una alternativa de empleo”. Ya preparan unas jornadas informativo-formativas dirigidas a empresarios. Todavía no hay fecha.
Alojamientos ‘Starlight’
Además de la certificación como ‘Destino Turístico’ existe otra modalidad dedicada a los alojamientos. La provincia de Albacete ya cuenta con una Casa Rural Starlight. Se trata del Cortijo Los Pradillos, en plena Sierra del Segura, a tan solo un kilómetro de la localidad de Férez.
Un segundo alojamiento que cuenta con la certificación está en Cuenca. Se trata del complejo El Moral, en el municipio de Valdecañas.
¿Cómo se consigue un certificado Starlight?
En la provincia de Albacete esperan que los proyectos reciban el visto bueno de la Junta de Castilla-La Mancha (que también gestiona y distribuye los fondos FEDER) después del verano. Y para 2018 esperan ya tener dispuesta alguna actividad.
Hasta la fecha, solo una zona de la región, la Serranía de Cuenca, ha sido declarada ‘Destino Turístico Starlight’. Precisamente en Cuenca, se celebrará el próximo mes de noviembre el Congreso Estatal de Astronomía.
La Fundación Starlight ha confirmado también que en la provincia de Ciudad Real se están dando los primeros pasos desde el Valle de Alcudia y Sierra Madrona para conseguir la certificación. Algo que, según ha explicado la entidad a eldiarioclm.es requiere de varias fases. “Lo primero es que se haga una petición oficial desde el organismo que tiene competencias en el territorio aspirante a esa cualificación”, en este caso la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Se medirá la calidad del cielo en la zona con parámetros como la oscuridad, la nitidez, la transparencia o la nubosidad.
Una vez verificados estos parámetros se pasa a una segunda fase en la que se realiza una visita al territorio para conocer ‘in situ’ su potencial o los recursos con los que cuentan y con esos datos se elabora un Informe de Asesoramiento Astroturístico con las líneas que deben seguirse en el territorio y se procede a su certificación que tiene una vigencia de cuatro años. Una vez concluidos, la Fundación deberá determinar si procede o no la renovación.