El busto de Archibald Dickson, el capitan del buque 'Stanbrook', que salvó la vida a 2.638 personas que huían de la represión franquista que se avecinaba al embarcarlas en Alicante a finales de la Guerra Civil en marzo de 1939, ha vuelto a sufrir el vandalismo de la extrema derecha.
En este caso la inscripción que recuerda los hechos históricos que tuvieron lugar en las postrimerías de la Guerra Civil han sido pintadas de negro y además se han acompañado de una esvástica nazi. Pero esta no es la primera vez que el busto sufre el ataque de la extrema derecha desde su inauguración en 2014 con motivo del 75 aniversario del salvamento.
El primer ataque fue en mayo de 2017 cuando sufrió un acto vandálico y arrancaron la placa de la inscripción del monumento, justo un día después de que el pleno del consistorio alicantino aprobara iniciar el hermanamiento con la ciudad natal del capitán Dickson, Cardiff (Gales). Dos años más tarde, en 2019, cuando se preparaban los actos para la conmemoración del 80 aniversario del salvamento, se produjo una nueva vandalización y el mismo busto apareció con pintadas de la Falange y de una bandera de España.
El nuevo ataque pone de relieve la importancia que tuvo este hecho humanitario que tiene un homenaje permanente en el puerto gracias al trabajo de la Comisión Cívica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica que restauró el nombre y rostro del hombre que hizo posible esa huida. El capitán Archibald Dickson zarpó finalmente cargado con 2.638 personas hacia Orán (Argelia) en lugar de con el cargamento de tabaco, naranjas y azafrán para el que fue enviado a Alicante. El barco navegó al borde del hundimiento, esquivando a la aviación alemana que bombardeaba Alicante y sorteando al buque franquista Canarias, que trató de hundirlo.