El Ayuntamiento de Xàtiva descubre que no tenía registrada la propiedad de la plaza de toros cubierta
El actual equipo de gobierno de Xàtiva (PSPV, EU y Compromís) afirma que se ha llevado “algunas sorpresas” a la hora de revisar el inventario de los diferentes bienes municipales heredados del antiguo ejecutivo del PP. Así destacan que tuvieron un “susto formidable” al detectar que en el registro de la propiedad que la Plaza de toros de Xàtiva todavía figuraba a nombre del “Hospital, Beneficencia y Asilo de ancianos desamparados”, a pesar de que la compraventa se realizó en 2007 y de la “millonaria inversión” efectuada en este edificio durante los años siguientes.
La plaza de toros de Xàtiva, que data de principios del siglo XX y es del arquitecto modernista Demetrio Ribes (el mismo que proyectó l'Estació del Nord de Valencia), y se convirtió en unno de los proyectos icónicos de la etapa final del gobierno de Alfonso Rus. No obstante las obras dispararon su coste hasta costar 12 millones de euros, el doble de lo previsto inicialmente, todos pagados por la Generalitat Valenciana.
Pero además el equipo de gobierno de Roger Cerdà también ha descubierto que tampoco estaba registrada a su nombre la ropiedad del antiguo hospital, un edificio de estilo gótico civil que data del siglo XIII y restaurado por la Generalitat de Francisco Camps dentro de las actuaciones para la muestra La Llum de les Imatges en 2007. Actualmente este edificio es la sede de diferente
El concejal de Hacienda, Ignacio Reig, ha explicado que la regularización de estos inmuebles es “muy importante” para la hacienda municipal, puesto que redunda en un mayor ingreso procedente de la participación en los tributos del Estado. El Ayuntamiento ingresa una cantidad procedente de la hacienda estatal en proporción a los bienes inmuebles que tiene registrados a su nombre, de forma que el enorme valor catastral de este edificio y otras altas llevadas a cabo por la concejalía supondrá un mayor ingreso anual.
Reig ha manifestado que “a pesar de hacer obras faraónicas, con enormes sobrecostes, el anterior equipo de gobierno no se preocupó de inscribirlas al registro de la propiedad. Esto ha supuesto una mengua de ingresos a la hora de liquidar la participación en los tributos del Estado, con el consecuente perjuicio para las arcas municipales”.