Carlos Mazón ha recuperado en la Generalitat Valenciana a antiguos miembros del grupo mediático afín a Eduardo Zaplana. El último ha sido el periodista Joaquín Núñez García Aguilera, nombrado asesor de la Presidencia de la Generalitat Valenciana. Director de comunicación de la Diputación de Alicante bajo la presidencia de Mazón, el informador inició su carrera profesional como adjunto al director del periódico La Prensa entre 1997 y 2000, año en que la rotativa cerró dada su baja difusión y sus recurrentes pérdidas.
Se trata de la cabecera creada por el Grupo de Comunicación Arco Mediterráneo SA gracias a un préstamo de 541.000 euros concedido en 1998 por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) a pesar de las objeciones a la operación por parte de los servicios técnicos del banco público. El préstamo tenía por objeto la “ampliación, instalación y equipamiento” de cuatro redacciones, en Alicante, Benidorm, Elda y Elche. Sin embargo, el fallido proyecto sólo logró consolidar la redacción de Alicante (la de Elche funcionó poco tiempo y el resto ni siquiera se pusieron en marcha).
Enrique de Diego, actualmente en la órbita conspiracionista de la extrema derecha, fue director de La Prensa durante la breve andadura del periódico. Entre los accionistas del medio de comunicación figuraba, según los datos del Registro Mercantil, el actual secretario autonómico de Relaciones Institucionales y Transparencia, Santiago Lumbreras, alto cargo de Carlos Mazón en la Generalitat Valenciana proveniente del campo mediático afín al zaplanismo. Lumbreras había sido previamente jefe de Informativos de Ràdio 9, cargo en el que fue acusado de elaborar listas negras de periodistas, y ejerció como jefe de prensa de la Generalitat Valenciana en Alicante.
También figuraba como accionista de la sociedad editora de La Prensa Roberto Edgar Bataouche Pérez, un empresario muy cercano a Eduardo Zaplana que también fue presidente y consejero del Grupo de Comunicación Arco Mediterráneo SA.
Roberto Edgar Bataouche es uno de los procesados en el 'caso Erial' por, supuestamente, colaborar en la repatriación de la fortuna en paraísos fiscales del expresidente de la Generalitat Valenciana, que la Fiscalía Anticorrupción cifra en 20,6 millones de euros. El empresario sería beneficiario de 143.373 euros “en B”, según el auto de transformación a procedimiento abreviado dictado por la titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia.
El Ministerio Público solicita para Bataouche una pena de cinco años de prisión, además de una multa de 800.000 euros e inhabilitación para el ejercicio profesional y de comercio por un periodo de tres años, por un presunto delito de blanqueo de capitales.
El empresario también fue administrador del holding Tabarka Media, un grupo de comunicación de radios, televisiones y diarios locales auspiciado por Eduardo Zaplana con cargos como su jefa de prensa y exdirectora de Canal 9, Genoveva Reig.
El 1 de mayo de 2000 La Prensa dejó de publicarse y pasó a tener una periodicidad semanal. Joaquín Núñez García Aguilera se incorporó al diario El Mundo, entre otros medios, y fue jefe de prensa del Ayuntamiento de Alicante durante el mandato de la popular Sonia Castedo.
Por su parte, Santiago Lumbreras fue director de comunicación del parque temático Terra Mítica de Benidorm, del que Roberto Edgar Bataouche fue consejero. Lumbreras también ha sido jefe de gabinete de Mazón en la Diputación de Alicante, con Joaquín Núñez de director de comunicación.
Más de dos décadas después, el accionista y el director adjunto de La Prensa vuelven a coincidir en el Palau de la Generalitat Valenciana.