Como si fuera un fantasma del pasado, las nuevas revelaciones sobre los desmanes cometidos por la exdirectora del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM), Consuelo Císcar, han golpeado de nuevo al museo. Y frente a esto, el actual director, José Miguel García Cortés, ha querido de nuevo romper con la etapa pasada y defender al IVAM. Eso sí, denunciando la gestión que llevó a cabo la mujer del exconseller Rafael Blasco, encerrado en la cárcel por desviar el dinero destinado al desarrollo de los países más pobres a comprar pisos en Valencia.
“No es el caso IVAM, es el caso Consuelo Císcar”, ha expresado tajante García Cortés. El director del museo ha reivindicado que desde su llegada a la pinacoteca “se ha colaborado haciendo con la justicia de forma decidida. Hemos entregado toda la documentación que se nos ha requerido”. Y para evitar que la imagen del museo se vea dañada por estos hechos, ha afirmado que “el IVAM está por encima de todos los directores que han habido, del actual y de los futuros. Lo que se investiga son asuntos de la exdirectora, no del IVAM”.
“El IVAM es la joya de la corona cultural. Es un centro imprescindible en el debate cultural de Valencia y no podemos permitir que estos hechos arruinen el prestigio que tiene a nivel valenciano, nacional y europeo”, ha clamado para pedir que se “trabaje por ayudar a hacer más grande el IVAM. Aunque sea con la crítica para mejorar”. García Cortés intenta evitar que el fantasma del pasado se interponga en el presente artístico del museo. Y por eso, intenta desvincular al IVAM de la causa que afecta a todo el equipo directivo de Císcar.