Calp inicia las obras de remodelación de la desaladora del Barranc Salat para mejorar su rendimiento

La empresa mixta Aguas de Calpe ha emprendido las obras de remodelación de la desaladora del Barranc Salat. Con ello se pretende mejorar la eficiencia hídrica y eléctrica de las instalaciones y al mismo tiempo garantizar su capacidad de producción ante posibles incrementos de la salinidad del agua.

Las obras tienen un presupuesto de 1,5 millones de euros y está previsto que estén finalizadas este mismo año. Se trata, por tanto, de poner al día esta desaladora con más de 23 años de antigüedad, que cuenta con dos plantas: Barranc Salat I y Barranc Salat II. Está previsto llevar a cabo obras de remodelación de la planta Barranc Salat I, construida en el año 2000 con una capacidad de 8.000 metros cúbicos al día y por otro lado, ampliar en un bastidor más la planta del Barranc Salat II, del 2002, que cuenta con una capacidad de producción de 3.000 metros cúbicos al día. 

“Estas actuaciones permitirán asegurar la producción de la desaladora del Barranc Salat y por tanto, garantizar el suministro de agua potable a la población”, ha señalado la alcaldesa Ana Sala, quien ha destacado el papel “fundamental” que representa esta instalación en la prestación de este servicio en épocas de elevado consumo de agua como la estival. Y ha añadido que con estas obras la desaladora de Calp “tendrá también menos coste energético y se reducirán las pérdidas de agua”. 

Las obras de remodelación consistirán en la sustitución y mejora de los filtros y de las tuberías exteriores así como de las bombas de alta presión que serán reemplazadas por equipos de mayor potencia y eficiencia, además del aumento de tubos de presión para posibilitar el funcionamiento óptimo frente a una mayor conductividad del agua. También se instalará un nuevo sistema de bombeo de lavado de filtros que permitirá reducir las pérdidas de agua, entre otras actuaciones. 

Por otro lado, se realizará la ampliación de la planta de Barranc Salat II con un bastidor nuevo que permanecerá en reserva y que entrará en funcionamiento en caso de avería o de labores de mantenimiento de los otros bastidores de la planta con lo que garantizará la capacidad de producción de las instalaciones.