Compromís y el Grupo Confederal Unidos Podemos han presentado este jueves una proposición no de ley en la que exigen el cierre y desmantelamiento de la central nuclear de Cofrentes (Valencia), una vez expire la licencia de funcionamiento en marzo de 2021.
La iniciativa señala los riesgos y peligros de la estrategia energética del Gobierno del PP que prolonga la vida útil de las centrales nucleares, más allá del periodo de 25 años que recomienda la Agencia Internacional de Energía.
La solicitud llega después de que el director de la planta, Tomás Lozano, anunciara que pedirá la renovación de la licencia de Cofrentes en 2020. La central nuclear sigue así la senda de otras plantas obsoletas como Garoña, que esta semana ha abierto el plazo de alegaciones después de que el Gobierno abriera la puerta a alargar su funcionamiento hasta los 60 años.
Desde Compromís y Unidos Podemos exigen al Gobierno de Rajoy la apuesta por fuentes de energía alternativas, en lugar de “prolongar hasta la agonía el funcionamiento de las centrales”.
Los diputados valencianos de las dos formaciones han instado, además, al ministro de Energía, Álvaro Nadal, a rechazar la construcción de un almacén temporal de residuos (ATI). El proyecto es innecesario y evidencia “el fracaso de la política de gestión de basura radiactiva”, ha afirmado el portavoz de Compromís, Joan Baldoví. También la diputada de Podemos, Àngela Ballester, ha defendido “la desconexión de las plantas nucleares en las fechas previstas, sin prorrogas que pongan en peligro el territorio valenciano”
Asimismo, ambos han señalado que la energía nuclear es “uno de los principales obstáculos para las fuentes renovables limpias” y ha incidido en la necesidad de poner en marcha un Plan Estatal de cierre definitivo de centrales.
En marzo de este año, les Corts Valencianas ya aprobaron pedir al Gobierno el cierre de Cofrentes, solo con los votos en contra del PP.