El debate sobre la implantación del Sistema de Depósito, Devolución y Retorno de envases (SDDR) que lleva meses produciéndose en la Comunitat Valenciana de cara a su posible puesta en marcha a principios de 2018 se trasladará al Gobierno de España.
El secretario autonómico de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana, Julià Álvaro, ha asistido este miércoles a la presentación en el registro del Congreso de los Diputados de la proposición no de ley (PNL) relativa al impulso del SDDR en todo el Estado.
Los diputados Enric Bataller (Compromís) y Juantxo López de Uralde (Equo-Unidos Podemos) han sido los encargados de presentar el texto para su debate en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y en la Comisión de Cambio Climático.
Al respecto, fuentes de Compromís han comentado que el objetivo es que haya un debate a nivel de estado para poner de manifiesto que se trata de “un sistema que se va a poner en marcha en la Comunitat Valenciana y que se está estudiando en Navarra, Catalunya y Baleares por el que el Gobierno debería apostar en todo el territorio español por sus beneficios medioambientales”.
Las mismas fuentes han recordado que “tanto la normativa europea como la española amparan y avalan este sistema de retorno”, al tiempo que han advertido que “si el Gobierno de Rajoy se opone a un proyecto que es complementario al actual SIG (contenedores de reciclaje) y que eleva el reciclaje de envases hasta un 90% quedará en evidencia su nula preocupación por el medio ambiente”.
Sobre el proceso de negociación con los empresarios valencianos para la implantación del SDDR en la Comunitat tras el rechazo manifestado por la patronal, las mismas fuentes han informado que mantendrán una última reunión a principios de mayo, tras la que el anteprotecto de ley se trasladará a Les Corts para su debate parlamentario y aprobación definitiva.
Así, tras los mencionados encuentros la Conselleria de Medio Ambiente ha aceptado que los supermercados puedan instalar las máquinas de reciclaje en sus aparcamientos, mientras aquellos establecimientos que no tengan parking tendrán una moratoria para ponerlas más tarde, para que la puesta en servicio sea de forma progresiva.
El SDDR consiste básicamente en incrementar 10 céntimos el precio de los refrescos y bebidas en botellas de plástico y vidrio, que después son reembolsados a los consumidores una vez devuelto el envase en buen estado en los puntos de recogida habilitados, que serán todos los comercios y supermercados que los vendan, salvo la hostelería.