La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal

Les Corts inician la tramitación del nuevo programa de educación plurilingüe

El nuevo programa de educación plurilingüe empieza a debatirse. PSPV, Compromís y Podemos han presentado este miércoles el proyecto educativo para fomentar el valenciano en les Corts. Los socios del Botànic han adaptado el modelo que promovió el conseller de Educación, Vicent Marzà, y que el PP ha intentado tumbar en los tribunales con varios recursos.

El primer decreto, suspendido cautelarmente, es ya historia. La conselleria creó una norma de rango superior para salvar el curso presente y los tres partidos que apoyan al Gobierno presentaron esta iniciativa parlamentaria. El nuevo modelo elimina el principal aspecto conflictivo de su antecesor, sustituyendo el aprendizaje por escalones por porcentajes de enseñanza en cada lengua.

Un cambio que no resulta suficiente para PP y Ciudadanos, que siguen considerándolo un “chantaje” lingüístico y una forma de adoctrinamiento propia de partidos independentistas, aseguran los populares. La encargada de defender posición, Beatriz Gascó, ha insistido en que “hay sectarismo, manipulación y engaño a las familias. Bajo el anuncio de una norma plurilingüe se ve toda una obra de ingeniería social para imponer el valenciano”. En la misma línea se ha manifestado la diputada de Ciudadanos Mercedes Ventura, que considera que es una norma que “adoctrina”.

El objetivo de la norma, según ha explicado Josep Nadal, de Compromís, es apostar por la pedagogía, que los niños aprendan lenguas y favorecer el conocimiento en valenciano, especialmente en aquellas zonas donde el ecosistema lingüístico no lo permite, y generar igualdad de oportunidades. “Lo que hacemos es evitar conflictos si somos conscientes que aprender lenguas es positivo”, ha defendido. Ante las acusaciones de Gascó, el diputado ha recriminado: “Me da la sensación de que tienen un problema y es el poco respeto que tienen a la lengua de los valencianos. Es una vergüenza porque más que temas pedagógicos vienen a demostrar su valencianofobia”.

El trámite parlamentario ha salido adelante con los votos del PSPV, Compromís, Podemos y los cuatro diputados no adscritos que salieron de Ciudadanos.