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La fiscal interroga por un delito de amenazas al comandante de la Guardia Civil que quería “partirle las piernas” a la alcaldesa de Paiporta

El comandante Eduardo Aranda, tras declarar en la Ciudad de la Justicia, acompañado por su abogada.

Lucas Marco / Sergi Pitarch

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El comandante de la Guardia Civil Eduardo Aranda, autor de comentarios machistas y amenazas ante sus subordinados contra la alcaldesa de Paiporta, Isabel Martín, en unos audios publicados por elDiario.es, ha declarado este jueves en la Ciudad de la Justicia de Valencia en calidad de investigado. Tras la publicación de las grabaciones, en las que el guardia civil hablaba de “partirle las piernas” a la edil de Compromís, el Ministerio Fiscal abrió diligencias de investigación penal por un supuesto delito de amenazas. Aranda ha llegado poco antes de las 10 de la mañana acompañado de su abogada. Su declaración ha durado 45 minutos. Posteriormente ha acudido a declarar como perjudicada la propia Martín.

El suboficial del instituto armado, a preguntas de este diario, ha declinado hacer comentarios a la salida de su declaración. Aranda, que ha asegurado que se pronunciaría más adelante, ha declarado en calidad de investigado ante la fiscal Yolanda Domínguez, en presencia del letrado de la alcaldesa de Paiporta. El comandante también está imputado en el Juzgado Togado Militar central número 1, con sede en Madrid, por haber frenado una investigación por una presunta estafa con mascarillas en pleno confinamiento.

El mando de la Guardia Civil fue trasladado al Cuartel de Patraix de la Comandancia de València mientras avanza la investigación penal por un supuesto delito de amenazas. Según ha podido saber este periódico, Aranda ha estado en su casa desprovisto de sus funciones pero con sueldo y a la espera de destino.

Aranda, tal como informó este diario, arrastra una larga lista de enfrentamientos con sus subordinados y al menos dos imputaciones. Tras la publicación de los audios, la directora general de la Guardia Civil abrió una información reservada al comandante. Además, otros guardias y miembros de la AUGC criticaron duramente al Instituto Armado por la falta de contundencia con el oficial en anteriores conflictos con subordinados.

Las grabaciones se realizaron en una reunión entre Aranda y una decena de mandos y subordinados tras el fallecimiento de un joven en los toros de la localidad de l'Horta Sud.

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