Las denominaciones de origen Utiel-Requena y Alicante acudirán al Tribunal Supremo para intentar impedir que los vinos producidos en su área de influencia se puedan promocionar y vender como caldos de Valencia. El conflicto entre las tres DO valencianas comenzó en 2011.
Entonces, la Conselleria de Agricultura, aún con un gobierno del PP, elevó a oficial el reglamento de la DO Valencia que permite que la mayor parte de productores de Utiel-Requena y Alicante, si así lo desean, embotellen o comercialicen su producto bajo aquella marca. Tras varias años de negociaciones baldías, ambas DO recurrieron en 2014 la decisión ante el Tribunal Superior de Justicia, que no les ha dado la razón.
La reacción ha sido inmediata. En un comunicado, el presidente de la DO Utiel Requena, José Miguel Medina, asegura que la normativa “va en contra de los intereses de este territorio en su conjunto, porque la DO Valencia ha incluido en su demarcación unos terrenos vitícolas y unos viticultores que son de las otras denominaciones de origen”.
La DO de Alicante, en el mismo comunicado, no se queda atrás en las críticas. “Años de historia y prestigio para el consumidor no pueden confundirse de esta manera, más aún después del esfuerzo que ha realizado nuestra zona y del estado actual que se vive en cuanto calidad y certificación de productos”, asegura el presidente, Antonio Miguel Navarro.
Oficialmente, la iniciativa de la DO Valencia, secundada por la Generalitat con el visto bueno de sus técnicos y el conocimiento del Ministerio de Agricultura, únicamente formalizaba una práctica de casi 40 años: la venta de vinos de Utiel-Requena y Alicante bajo la marca Valencia, utilizada, muchas veces, para dar salida a excedentes que de otra forma apenas tenían mercado.
Las DO denunciantes, por contra, aseguran que su supervivencia está en juego y que la decisión desinforma al consumidor, ya que poco tiene que ver la variedad bobal (mayoritaria en Utiel-Requena) con, por ejemplo, la monastrell de El Pinós, en el sur de Alicante.
Según fuentes del sector, la polémica enfrenta, parcialmente, a grandes bodegas y multinacionales -favorecidas con el uso de la marca Valencia para colocar en el mercado sus grandes producciones- con productores de menor tamaño que se ayudan del prestigio de sus DO para vender su caldos.
Utiel-Requena tiene 34.000 hectáreas de viñedos, Alicante, 14.000 y Valencia 13.000. La cuarta zona vitivinícola valenciana, la Indicación Geográfica Protegida de Castellón, es mucho más pequeña: 226 hectáreas.