Un gol de Sergio Postigo en la segunda parte del partido que este sábado le ha enfrentado al Oviedo ha certificado el ascenso del Levante -el quinto de su historia- y ha puesto un broche de oro a una notable temporada en la que el conjunto valenciano ha recuperado la categoría un año después de perderla.
En un duro e intenso partido, el Levante fue fiel a lo que ha sido su temporada. Firme en defensa y al aprovechar la mejor ocasión que tuvo volvió a Primera ante un rival correoso que también tuvo sus opciones de llevarse el partido.
El Levante se hizo pronto con el peso del juego en el centro del campo ante un Oviedo que se defendía con soltura pero que no lograba controlar la salida del balón.
Sin oportunidades claras, fue el Levante el que merodeó con asiduidad la meta rival, pero fue el Oviedo el que tuvo las opciones más claras.
La primera de ellas llegó casi a la media hora de juego tras una jugada de Susaeta que despejó Postigo y la segunda en un disparo desde dentro del área de José Fernández al que respondió Raúl con una gran intervención.
Con el paso de los minutos el Oviedo trataba de dormir el balón en la medular y trataba de iniciar el juego desde atrás para avanzar líneas e intentar evitar que el Levante siguiera acechando su área.
En la recta final del primer ninguno de los dos equipos tuvo el control del juego. Las llegadas se sucedían en ambas porterías en busca del gol que diera el ascenso a los locales o que asentase a los visitantes en la zona de promoción pero al descanso se llegó con la igualada inicial.
Tras una primera ocasión para el Oviedo en los primeros compases de la segunda parte, el conjunto levantinista fue a por todas en busca del gol que premiase su gran temporada y le devolviera a la Primera División del fútbol español.
Gol de Postigo
Así, dos minutos después de que el arbitro no señalase penalti en una acción de Lucas Torró sobre Chema llegó el gol. Un cabezazo de Postigo en el minuto 55 abrió el marcador que daba, en ese momentos, el ascenso matemático al Levante.
El gol espoleó a los levantinistas y Víctor Casadesus, que acababa de entrar, tuvo la oportunidad de marcar el segundo gol en el minuto 62 pero el meta Juan Carlos sacó una gran mano ante el cabezazo del atacante local.
Pero el Oviedo reaccionó y empezó a presionar al Levante en la salida de balón y a buscar su portería con peligro con Toché como jugador más activo de los ovetenses y autor de u disparo al palo corto que desvió a córner con dificultades el meta Raúl.
El Levante pasó por sus peores momentos en el partido en el ecuador de este periodo. El equipo de Fernando Hierro maniató la línea de creación del equipo de Muñiz si bien en ataque no se mostraba contundente ante una defensa local que tenía que trabajar a pleno rendimiento.
En la recta final del partido el Levante intentó dormir el juego y aprovechar su ventaja en el marcador a la par que el juego se enturbiaba con acciones duras por parte de ambos equipos.
Sin embargo, con el lógico sufrimiento final ante un Oviedo que buscaba la igualada el partido se cerró con un histórico triunfo del Levante que dio paso a una invasión de campo de los enfervorecidos aficionados levantinistas que celebraron el triunfo con sus jugadores sobre el césped.