Unas 500 vespas llegadas de toda España tomaron Castellón el fin de semana del 6 al 8 de junio en la mayor concentración nacional de estas motocicletas, la VespAzahar. Esta quinta edición, será, según el organizador y presidente del Vespa Club Castellón, Javier Armengol, “especial”. “pues se pretende fomentar más que nunca el turismo con más kilómetros de rutas por la provincia. El sábado se visito Borriol, l’Alcora, Cabanes, Costur, la Barona, el Desert y Benicàssim, con salida y llegada en Castellón, en 100 kilómetros para ver, para llegar, que no parar correr, como reza el lema de la Vespa”.
Armengol explica que este año han llegado aficionados de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Albacete, Bilbao, San Sebastián, Murcia, Teruel, Tarragona, Lleida, Girona, Ciudad Real, Córdoba y Almería, pero, sobre todo, de todos los puntos de la provincia“. ”Es una cita ineludible para los amantes y coleccionistas“, asegura el presidente del club, que incide en que ”hasta Castellón han llegado motocicletas auténticas, de los años 40, 50 y 60 restauradas que son verdaderas joyas“.
La cita comenzó el viernes 6, a las 18.00 horas, con la recepción en Tetuán XIV y un recorrido, ya a las 20.00 horas, por el centro de Castellón hasta el Grao, con una salida nocturna y cena en la Pérgola. Por la noche se llevo a cabo una fiesta Pop Sixties.
El sábado fue la jornada de la ruta Castellón interior durante toda la mañana, para, ya de tarde, mostrar los vehículos en la plaza Santa Clara, que se convertió por unas horas en la capital nacional de las vespas. El domingo hubo una ruta matinal desde Castellón a Benicàssim pasando por el Grao, con una paella monumental para los participantes a cargo del restaurante Jota’s.