La entidad Solidaritat País Valencià ha celebrado este domingo frente a la Estació del Nord de València una concentración para exigir la libertad de los presos políticos en Catalunya, a la que han acudido aproximadamente un centenar de personas, y en la que se ha criticado que “la separación de poderes necesaria en un estado de derecho ha desaparecido” en España. “El diálogo y el debate políticos han sido sustituidos por la persecución judicial”, han denunciado.
La convocatoria, que ha tenido lugar el día en que se cumplen seis meses desde la encarcelación de los expresidentes de Òmnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana, Jordi Cuixart y Jordi Sànchez, ha comenzado a las 13 horas, simultáneamente a la que se ha llevado a cabo en Barcelona con el mismo objetivo.
Los representantes de Solidaritat han denunciado que “se han incrementado los ataques a la libertad”, de modo que “estamos viviendo en los últimos años un proceso de degradación democrática sin precedentes desde la muerte de Franco”.
Así, han advertido que pilares fundamentales, como el debate político, han sido sustituidos “por la persecución judicial a partir de la invención de delitos, como el de rebelión o de sedición”. Según la entidad, esto no hubiera sido posible “sin el control del aparato judicial con jueces allegados nombrado a dedo e instituciones como el Tribunal Constitucional o el Supremo” o “la complicidad de los medios de comunicación partidarios del régimen”.
En este sentido, han acusado al Gobierno central de no haber “dudado en vulnerar la Constitución con la aplicación del artículo 155, un golpe de estado contra los mismos principios constitutivos” del Estado español y de haber ofrecido como “única” respuesta a “la voluntad mayoritaria reiteradamente expresada en las urnas”, “multas, palizas, insultos, prisión o exilio”.
Al respecto, han aseverado que la “escalada de represión” en Cataluña ha sido una “excusa necesaria para encubrir la corrupción sistemática, la crisis de una monarquía inviable que ha disciplinado todos los poderes del estado al servicio del partido del poder y un colapso generalizado del régimen nacido en 1978”.
En esta línea, ha expuesto que además de los presos políticos como Anna Gabriel o Marta Rovira, según un informe de Òmnium Cultural ha habido “más de 1.000 sancionados o investigados por ejercer las libertades en 2017”.
De este modo, se ha producido la “censura de obras de artes, secuestro de libros, la causa contra Trapero o las agresiones fascistas que no suelen ser ni tan solo investigadas”, entre otros. Igualmente, han señalado la condena del rapero mallorquín Valtonyc a tres años y medio por sus canciones, el procesamiento a Cassandra Vera por “unos comentarios en Twitter” y la condena al cantante Pablo Hasel por sus canciones.
Por último, desde Solidaritat han reiterado que “la represión nunca ha sido tan generalizada”. Ante esta situación, este domingo, “el día siguiente a la proclamación de la Segunda República”, la entidad ha rendido “un homenaje a todos los represaliados de aquella barbarie y a las víctimas del fascismo de la Transición y los años posteriores, en especial, a los jóvenes valencianos Miquel Grau y Guillem Agulló”, han concluido.