Compromís aborda el futuro político de Mónica Oltra mientras Puig presiona para su salida

La reflexión colectiva sobre cómo mitigar el impacto de la imputación de Mónica Oltra sobre el proyecto de izquierdas iniciado en 2015 con el Pacto del Botánico se realizará por fases. La primera, este martes, en la sede de Compromís, que reunirá a su Ejecutiva, con representantes de las tres formación políticas que componen la coalición valencianista (Més Compromís, Iniciativa i Verds-Equo) para abordar el futuro político de la número dos del Gobierno valenciano.

La reunión tiene carácter ordinario y estaba programada antes de conocer la decisión del Tribunal Superior de Justicia, pero la situación de la vicepresidenta centrará el encuentro que arranca por la tarde. Desde entonces, la coalición valencianista ha cerrado filas en torno a Oltra. El sábado Compromís manifestó el apoyo a su líder en un acto que teóricamente iniciaba la preparación para las elecciones de 2023, bajo el lema 'Cap al tercer Botànic' (hacia el tercer Botánico), en referencia al acuerdo de gobierno de la Generalitat Valenciana. En ese acto participaron los principales rostros de la formación.

Compromís recalca que es una fuerza imprescindible para reeditar el pacto de gobierno progresista y advierte a sus socios que Oltra es un elemento fundamental en ese engranaje, advirtiendo contra toda pretensión de “decisiones unilaterales” por parte del presidente, el socialista Ximo Puig. A su vez, varios miembros de la Ejecutiva, el órgano de decisión de la coalición, insistieron en que hay que abordar la situación, que puede lastrar el proyecto político, antes de que Puig tome alguna decisión, para lo que habría dado de plazo hasta el fin de semana, según fuentes del Gobierno valenciano. Desde que el juez de instrucción solicitara al Tribunal Superior de Justicia la citación de Oltra como investigada por la gestión de su departamento en el caso de abusos a una menor tutelada por la que fue condenado su exmarido, en Compromís se habla de cuál es la mejor forma de mantener el proyecto político sin restar fuerza a la vicepresidenta, que ha sido desde 2011 su cartel y su tirón electoral.

El alcalde de València, Joan Ribó, que forma parte del órgano de decisión, apunta: “Es un momento en el que la compañera Mónica Oltra está pasándolo mal y es importante que toda la gente de Compromís le demos nuestro apoyo”. Un respaldo que no es incompatible con pensar en movimientos políticos. La imputación, considera, “no es agradable” y recuerda que viene motivada por una querella de la extrema derecha (el abogado de la víctima de abusos es el dirigente de la organización ultra España 2000). “Hemos de estudiar la situación porque una imputación, que está ocasionada por unas personas muy determinadas y unas actuaciones muy determinadas, se ha de estudiar con especificidad”, insistió en un acto municipal este lunes.

Ningún integrante de la coalición quiere verbalizar qué escenarios se barajan, aunque una opción es que la vicepresidenta mantenga un perfil bajo en el Consell mientras prepara su defensa judicial. Este perfil bajo puede traducirse en que Oltra deje de ser portavoz del Consell pero mantenga su cartera -la vicepresidencia y la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas- o que siga como vicepresidenta pero sin ser titular de la gestión del departamento, unas teorías que deberían discutirse con el PSPV y Unides Podem. En todo caso, apuntan algunas fuentes, la decisión no tiene por qué tomarse en una semana -como apuntaba Puig este lunes- sino que ahora empieza el proceso de reflexión. “Por el bien de un tercer Pacto del Botánico, no tomemos decisiones precipitadas”, apunta un dirigente de Compromís, que añade que hay que “adoptar decisiones que sean cómodas para todos”.

Para Mireia Mollà, consellera de Transición Ecológica, Oltra es “la representación de las políticas a favor de las personas, de la lucha contra la corrupción, de haber dado la vuelta a un gobierno secuestrado por la derecha más corrupta que había significado también la indignidad respecto a las instituciones valencianas, y es compatible darle el apoyo absoluto a la vicepresidenta y a su papel en la política valenciana y, al mismo tiempo, decir que, obviamente, son tiempos de reflexión”. La dirigente de Compromís insiste en que la coalición debe abordar el impacto de la imputación judicial en el proyecto político del Botánico.

El portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, reiteró el “apoyo total” que se mostró el sábado y advirtió de las “decisiones unilaterales”, como ya hizo Àgueda Micó, portavoz de Més Compromís, el pasado viernes, con el ojo puesto en Ximo Puig. El presidente socialista quiere abordar esta cuestión de forma colectiva en el Ejecutivo autonómico e insta a las partes a reflexionar sobre las consecuencias que pueda tener para el proyecto político la situación procesal de la vicepresidenta, pero, según asegura su entorno, esperará a ver qué decisión toman en Compromís antes mover ficha. En caso contrario, estaría dispuesto a apartar a Oltra. Este lunes, preguntado por el impacto de la imputación, Puig recalcaba que el acuerdo del Botánico es ante todo “un pacto con la sociedad valenciana”. “No podemos fallar a la sociedad valenciana, tenemos que poner por encima de cualquier cosa un proyecto que ha conseguido levantar la hipoteca reputacional” de la comunidad autónoma, añadía.

Iniciativa, el partido del que forma parte la vicepresidenta en la coalición, ratificó este fin de semana en su órgano ejecutivo el apoyo a Oltra, recalcó el origen de la denuncia y manifestó: “La firmeza en la defensa de las garantías democráticas es vital en medio de la deriva de antipolítica y populismo punitivo que facilita, como hemos visto en otros casos, el lawfare contra representantes políticos de izquierdas”.

La citación del TSJ, donde Oltra declarará el 6 de julio, intensifica la presión al Ejecutivo autonómico, cuyos miembros se ven constantemente interpelados por la situación procesal de la número dos, lo que empaña la acción del Gobierno. La oposición ha centrado sus intervenciones del último año en atizar políticamente a la vicepresidenta y acusar al presidente de complicidad, una estrategia que la siguiente fase del proceso judicial refuerza. La agenda de PP, Ciudadanos y Vox pasa por golpear a Oltra para golpear al Botánico, y los partidos que lo componen no saben si su electorado lo resistirá. Con todo, parece que la respuesta de Compromís no será inmediata. “Se está hablando y se seguirán hablando esta semana”, indica un cargo público de Compromís, miembro de la ejecutiva de la formación.