La dirección estatal del PP parece que no pondría la mano en el fuego por la gestión de Camps en el partido a nivel regional. Así, después de que la Fiscalía haya pedido una condena de hasta casi 8 años de cárcel para cada uno de los miembros de la cúpula del partido por la presunta financiación irregular de las campañas de 2007 y 2008, el vicesecretario de Organización y Electoral del PP, Carlos Floriano, ha pedido “se aclaren las cosas” y que“si hay que devolver dinero, que se devuelva”.
El presunto delito electoral, enmarcado dentro de la tramz 'Gürtel' podría haber supuesto la donación irregular de hasta 3,5 millones de euros para financiar la campaña electoral autonómica de 2007 y de las Generales en 2008, elecciones que marcaron el récord de votos de un partido en la historia de la democracia en la Comunitat Valenciana.
“Espero que esas cuestiones se aclaren cuanto antes”, ha sido la respuesta de Floriano ante las varias preguntas sobre el asunto. El número tres del PP no ha querido profundizar en si el partido debe dar más explicaciones, si con la responsabilidad de los dirigentes imputados es suficiente.
“En el PP de Valencia toda la gente ha ido abandonado sus responsabilidades en el ámbito político. Que se determinen responsabilidades y que se devuelva el dinero si es que se tiene que devolver, que es algo que preocupa mucho a los ciudadanos”, ha insistido.
La gerente en cuestión
Floriano ha sido preguntado por el caso de la gerente del PPCV, Cristina Ibáñez, imputada por el caso Gürtel desde el año 2011 y cuyo cargo no es público, sino que depende del partido y es éste el que la puede despedir si lo considera necesario.
El dirigente 'popular' ha asegurado que los servicios jurídicos de la formación en Madrid están estudiando su situación. “Cuando tomen decisiones, lo comunicaremos”, ha añadido.