La candidata del PP a la Alcaldía de Valencia, María José Català, ha confesado este jueves sentirse “muy satisfecha, contenta e ilusionada” con su designación y ha dicho que su candidatura parte “de una buena herencia” como es la dejada por quien fuera alcaldesa de la ciudad durante 24 años, Rita Barberá.
En una comparecencia en la sede del PPCV junto a la presidenta regional del partido y candidata a la presidencia de la Generalitat, Isabel Bonig, Català ha dicho estar “tranquila pero consciente del reto” que asume, “muy ilusionante”, y ha avanzado que su candidatura requiere un perfil que combine renovación y experiencia.
La actual diputada en las Corts, exalcaldesa de Torrent, exconsellera y exportavoz del Consell de la Generalitat ha reconocido que “será difícil” pero intentará “estar a la altura” del proyecto municipal que dejó Barberá.
Sobre si los ocho concejales suspendidos cautelarmente de militancia en el PP por estar investigados (antes imputados) en una pieza del caso Imelsa podrían ir en su lista electoral, Català ha anunciado que quiere hablar “personalmente” con ellos antes de hacer declaraciones al respecto.
Respecto al portavoz municipal del PP, el independiente Eusebio Monzó -el único del grupo que no está investigado-, y al presidente de la gestora en la ciudad, Luis Santamaría, ha valorado que sean “dos puntales fundamentales” del proyecto del partido en Valencia pero ha insistido en que “es pronto” para hablar de si irán o no en su lista.