La presidenta de las Corts Valencianes, la ultraderechista Llanos Massó, se salta el compromiso institucional contra la violencia machista. La representante de Vox y segunda autoridad de la Comunitat Valenciana, elegida con el apoyo del PP, evita la pancarta que condena la violencia machista tras el asesinato de una mujer en el municipio valenciano de Antella, pese a las declaraciones institucionales y los acuerdos suscritos por la Cámara que preside.
El Parlamento autonómico convocó este lunes tres minutos de silencio por el asesinato de una mujer de 38 años a manos de su pareja, en presencia de uno de sus hijos menores de edad. Los servicios de las Corts Valencianes trasladaron a los grupos la convocatoria por indicación de Presidencia, que se realizaría, a las 12 del mediodía “para condenar el asesinato de una mujer sucedido en Antella este fin de semana”, sin alusiones a la violencia de género.
Una hora antes de la convocatoria, cuando la Mesa de las Corts se encontraba reunida, en una sesión prevista con anterioridad, la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género confirmó que se trata de un caso de violencia de machista. Al exhibir la pancarta, los diputados de Vox, con la presidenta incluida, se apartaron, como han venido haciendo durante los últimos cuatro años. El PSPV ha reclamado a la presidenta que incorpore el reconocimiento de la violencia machista, en virtud de los compromisos institucionales suscritos, a las convocatorias de repulsa, y junto a Compromís ha criticado que se rompa la unidad y se mantengan al margen.
En las dos últimas legislaturas el Parlamento valenciano adoptó un protocolo en consonancia con las declaraciones institucionales aprobadas en la Cámara y el pacto valenciano contra la violencia de género aprobado por la Generalitat Valenciana, suscrito por la sociedad civil. El compromiso de las Corts Valencianes implica que, cuando se tenga conocimiento de un caso de violencia machista, se convocarán tres minutos de silencio y se manifestará la condena. Durante las dos últimas legislaturas, los responsables de protocolo de la Cámara llevaban a los grupos parlamentarios la pancarta que expresa la repulsa de la institución, con el lema “Les Corts contra la violencia masclista” durante los minutos de silencio.
El pacto valenciano contra la violencia machista tiene entre sus objetivos “generar un relato compartido de lucha contra la violencia de género y machista, sin la doble victimización de las mujeres, la confrontación política y social con los agresores machistas y la socialización del conflicto”. En este sentido, uno de los compromisos que atañe al Parlamento valenciano es “expresión de unidad de acción parlamentaria y política ante violencias machistas”. Otro, que atañe a todas las partes intervinientes, es “participar en todas las concentraciones públicas de rechazo a la violencia, solidaridad a las víctimas y condena al maltrato”.
En 2018, las Corts Valencianes aprobaron una declaración institucional en la que asumían: “Es responsabilidad de Les Corts trabajar de manera concienzuda para eliminar todas las manifestaciones de las violencias contra las mujeres en la vida pública y privada, para acabar con los prejuicios sexistas en las administraciones públicas y para asentar en la conciencia de la sociedad la necesidad de terminar con la violencia machista y sus múltiples manifestaciones”. El texto salió adelante por unanimidad, requisito de todas las declaraciones institucionales, con el apoyo de PP, PSPV, Compromís, Ciudadanos y Podemos. Vox no tenía representación parlamentaria.
El PP evita criticar a sus socios
Los representantes de Vox justifican su acción en que “toda la violencia ejercida contra cualquier persona tiene que condenarse de la misma manera”. Así lo ha expresado su portavoz parlamentaria, Ana Vega, que ha defendido a la presidenta de la Cámara. La parlamentaria considera que “estar detrás de una pancarta o no, no implica que se condene con mayor perseverancia y fuerza una cosa u otra” y ha insistido en su condena de la violencia “se ejerza contra quien se ejerza”. Preguntada por si cambiarán el lema de la pancarta, Vega ha señalado que esto le corresponde a la Mesa de las Corts y ha indicado que llevan cuatro años “trabajando por proteger a todas las víctimas por igual”. En el acuerdo de gobierno entre PP y Vox no figura la violencia de género, que la extrema derecha niega. Sí lo hace la “violencia intrafamiliar”, marco en el que la formación ultra engloba las agresiones a mujeres por parte de sus parejas o exparejas. El candidato de Vox al Congreso Carlos Flores, condenado por violencia psicológica en 2002, ha comparado el asesinato de esta mujer con la muerte de un hombre en una pelea.
Por su parte, el portavoz del PP, Miguel Barrachina, quien sí ha estado tras la pancarta, ha evitado criticar a sus socios de gobierno, que le darán la presidencia de la Generalitat Valenciana a Carlos Mazón dentro de tres días para gobernar en coalición. El síndic ha subrayado que lo realmente importante es que sea la segunda mujer asesinada en la Comunitat Valenciana y que 24.000 mujeres han denunciado agresiones en el último año, “más allá del simbolismo” de los lemas.
Barrachina ha apuntado: “Hoy estaba todo el mundo denunciando el asesinato vil y cruel de esta mujer”. Y ha indicado que el PP siempre está “detrás de todas las pancartas de denuncia de crímenes machistas”. “La solución no puede ser la excarcelación masiva de agresores”, ha reprochado, en alusión a la ley del 'Solo sí es sí'.