De la prisión de Picassent, a las Corts Valencianes en apenas un fin de semana. El exconseller popular Rafael Blasco ha comparecido este lunes en la comisión de investigación del caso Taula en el Parlamento valenciano y la ha convertido en un debate sobre la reinserción de los presos.
Blasco, tres veces conseller con el PP y una con el Gobierno socialista, estaba llamado a declarar para explicar unos contratos de una de sus consellerías con la empresa Engloba, una suerte de Orange Market a la valenciana investigada en el caso Taula. Engloba fue la empresa de cabecera del PP en la Diputación de Valencia y en la Generalitat, según los informes policiales.
Blasco ha afirmado no recordar esa empresa con la que firmó un contrato de 9.000 euros en 2011 para promocionar el hospital de Haití que no se construyó, investigado en otra pieza del caso Cooperación, a preguntas del síndic de Compromis, Fran Ferri. “Alguien recomendaría a la empresa si estaba en el sector”, ha dicho el popular, quien ha evitado la mayoría de las preguntas de los diputados.
El exconseller de Cooperación se ha dedicado a filosofar sobre su estancia en prisión con los diputados. “He aprendido la lección de mi estancia en la cárcel y me siento muy agradecido de las muestras de solidaridad que he recibido”, ha señalado Blasco, quien ha añadido que es “una persona consecuente con una sentencia judicial condenatoria”, que ha “asumido con toda su importancia”, lo que supone “una asunción de errores y delitos que, por sentencia, se me ha planteado”.
“Estoy devolviendo a la sociedad un delito que se me ha asignado”, ha insistido, para considerar que “un demócrata tiene que aceptar en un Estado de Derecho las condenas”. Blasco fue condenado a seis años y medio por delitos de malversación y falsedad documental por el desvío de fondos públicos destinados a cooperación internacional, y disfruta ya del tercer grado penitenciario al haber cumplido la mitad de su condena.
“Nunca pensé que la algarabía que se montó en mi conselleria se había cometido. Me resistí a aceptarlo políticamente y no dimití. Fue un error. Me resistí a aceptar políticamente que había un lío en esa conselleria. Me resistí a dimitir y me equivoqué”, ha admitido Blasco en la comisión.
Acusa al Consell de Lerma de pedir comisiones a los contratistas
En declaraciones a los periodistas a la salida de la comisión, el exconseller ha acusado al PSPV que dirigió Joan Lerma de haber dado indicaciones a sus cargos públicos para que reclamasen el pago del 10 % en comisiones a los contratistas.
“He vivido muchas cosas en política, he estado en un partido socialista en el que el secretario de organización mandaba circulares a los cargos públicos pidiéndoles a todos los que contrataban en las instituciones que cobrasen una comisión del 10 %, lo he visto, está firmado”, ha asegurado.
En este sentido, ha invitado a los periodistas a recurrir a la “maldita hemeroteca”, porque “verán cosas sorprendentes”.