El PSPV llevará a la Fiscalía los sobrecostes de 256 millones de euros, muchos sin justificar o camuflados con facturas falsas, que los auditores de la Generalitat han descubierto en Feria Valencia, según desvela Valencia Plaza. Feria Valencia es una institución semipública con una deuda de casi 600 millones de euros.
El PSPV y Compromís, además, han responsabilizado de la quiebra de hecho de la institución, controlada por el Ayuntamiento de Valencia y sostenida financieramente por la Generalitat, a Rita Barberá, presidenta del patronato de la entidad.
La alcaldesa de Valencia era la valedora del anterior equipo de gestión: el presidente, Rafael Catalá, y la directora Belén Juste, exconsellera de Industria y ahora diputada del PP en el Congreso de los Diputados. El primero dimitió en octubre de 2013 tras despedir a la mitad de la plantilla y sin apenas dinero para atender los gastos corrientes.
Una investigación para la “cueva” de Feria Valencia
El líder del PSPV, Ximo Puig, exige también una investigación parlamentaria sobre una institución que se amparaba en su carácter semiprivado para no dar cuenta de sus gastos –a pesar de las cuantiosas inyecciones de fondos públicos- y que se negaba a ser auditada por la sindicatura de Cuentas.
“Vamos a pedir la creación de una comisión de investigación en las Corts Valencianes para ver lo que ha pasado en esa cueva que es Feria Valencia”, ha dicho Puig. Compromís, además, ha cargado contra Rita Barberá. “Las conclusiones del informe de la intervención de la Generalitat contra el patronato de Feria Valencia son muy graves, y la responsable es Barberà. Desde Compromís llevamos años exigiendo información sobre la ampliación de la Feria y ahora una auditoría encargada desde la Generalitat, gobernada por el Partido Popular, ha revelado un auténtico desfalco de dinero público. Barberà tiene que dar explicaciones y asumir responsabilidades por estas gravísimas acusaciones”, ha dicho Consol Castillo, concejal de la coalición en Valencia.
Joan Calabuig, edil del PSPV en Valencia, también ha arremetido contra Barberá. “Se ha convertido en la cómplice necesaria para el hundimiento y el declive de un órgano fundamental para que Valencia tenga proyección internacional y pueda reactivar su economía”. “Si Barberá no está dispuesta a darse por aludida, que abandone el cargo”, demanda.