El proceso de diálogo competitivo que finalizó con la adjudicación del 70% de la Universidad Internacional de Valencia (VIU) al grupo Planeta en 2013 se realizó en base a documentación y valoraciones que quedaron obsoletas a los pocos días de seleccionarse la oferta de la mencionada mercantil.
Así se desprende del Informe de estimación técnica del valor razonable' de la VIU encargado a dedo a Janus Antebo Asesores SL por la entonces consellera de Educación, ahora candidata del PP a la alcaldía de València, María José Catalá, y del informe posterior de valoración “para aportación no dineraria” de la misma consultara a los que ha tenido acceso elDiario.es, a pesar de “considerarse confidencial y de uso exclusivo del Patronato de FVIU”, según refleja el documento.
El consultor realizó el primer trabajo por medio de un contrato menor valorado en 6.700 euros en apenas una semana. Si el viernes 2 de agosto se firma el contrato, el 9 de agosto el patronato de la fundación tiene en sus manos el primer documento, que aporta una estimación técnica por la cual se considera que la VIU tiene un valor de 2,1 millones de euros.
El informe pone de relieve que la valoración se ha efectuado con la documentación que le ha aportado la Fundación VIU sin que esta haya podido ser verificada, por lo que se desvincula de posibles errores o consecuencias legales: “No hemos llevado a cabo, ni se nos ha solicitado, la auditoría de la información utilizada”.
Además, destaca que en el momento de la venta de la VIU la crisis de los mercados financieros “no hace más que agravar la disminución tanto del número de operaciones de inversión como de los precios que se acuerdan en ellas” y que la valoración se realiza pese a estar “pendientes de obtenerse el informe de auditoría de las cuentas anuales y el informe de auditoría de cumplimiento de la legalidad correspondiente al ejercicio 2012”.
El 4 de octubre de 2013 la mesa de contratación propuso adjudicar la venta del 70% de la VIU al grupo Planeta por 4 millones de euros, por lo que pocos días después, tanto el pleno del Consell como el Patronato de la VIU acuerdan constituir la sociedad limitada para transmitir la unidad de negocio de la VIU, pese a que hasta ese momento el Gobierno valenciano había invertido en la universidad 34 millones de euros.
Nuevas titulaciones
Sin embargo, pocos días después, en concreto el 31 de octubre, la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y la Acreditación (Aneca) aprueba nuevas titulaciones de la VIU, lo que dispara su valoración pasando de los 2,1 millones iniciales a 3,8 solo en lo que a las licencias universitarias se refiere y a los 5,7 millones en los que finalmente se tasa.
Así lo refleja el segundo de los informes de la consultora (valoración para aportación no dineraria) emitido el 8 de noviembre de 2013, según el cual, “el 9 de agosto se entregó a los participantes en el proceso de diálogo competitivo el documento descriptivo final para la presentación de ofertas vinculantes para la adquisición del negocio de la VIU”.
A lo que añade: “Un factor que se ha producido con fecha 31 de octubre de 2013 y que tiene una relevancia considerable es la aprobación por parte de Aneca de las propuestas de la VIU sobre los títulos oficiales de Graduado o Graduada de Administración y Dirección de Empresas y Graduado o Graduada en Economía (...). Adicionalmente, Aneca ha aprobado también, desde el pasado 23 de octubre de 2013, el plan de estudio del Master Universitario en Astronomía y Astrofísica”.
El balance realizado finalmente por el consultor concluye que la VIU cuenta con unos activos de 7 millones de euros tras las nuevas titulaciones aprobadas por Aneca, de los que 3,8 millones corresponden a la licencia universitaria de la VIU. Los pasivos arrojan la misma cifra al incluir los 5,7 millones en concepto de capital social y prima de asunción correspondientes a la aportación de la Fundación a la sociedad limitada.
Catalá, quien pilotó el proceso de venta, es actualmente profesora asociada de la VIU sin que haya hecho público su sueldo, más allá de remitirse a lo publicado por este medio en relación a los 7.300 euros que cobran otros profesores con su misma dedicación. La también portavoz valenciana del PP siempre ha defendido la legalidad de la privatización, así como los ingresos que ha obtenido la Generalitat por el 30% de participaciones que mantiene en la VIU, cuando antes costaba de media dos millones al año a las arcas públicas.