Ribó plantea eliminar el 'bou embolat' y las pedanías discrepan
La política a seguir con el tratamiento de los toros en Valencia ha tensionado este martes las relaciones en el seno de la coalición Compromís que gobierna el Ayuntamiento, con el apoyo del PSPV y de València en Comú.
Y es que, el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, ha manifestado en Radio Valencia Cadena SER su intención de eliminar el bou embolat de las pedanías en las que se celebra este festejo: “No habrá bou embolat en Valencia en 2016, me parece algo bastante detestable”, ha dicho textualmente.
Así, según han explicado fuentes municipales, la intención es que no se celebre ninguna festividad en la ciudad que suponga maltrato animal: “Se van a revisar todos los actos abriendo un proceso de diálogo con los alcaldes pedáneos y con las peñas”.
En este sentido, han confirmado que consideran el bou embolat como una forma de maltrato, por lo que en las pedanías donde se celebre tendrán que buscar otras alternativas.
Sin embargo, fuentes de la Concejalía de Agricultura y Pobles que dirige Consol Castillo (Compromís), se han mostrado reacios a eliminar esta festividad puesto que es “una tradición muy arraigada en pedanías como Borbotó o Carpesa”.
Además, han añadido que si las peñas cumplen todos los requisitos legales difícilmente se les podrán denegar los permisos.
Desde esta delegación se han mostrado más partidarios de seguir con la política de no conceder subvenciones municipales para estas fiestas y no ir más allá, salvo que se abra un proceso de participación.
En la misma línea se ha mostrado el alcalde pedáneo de Borbotó, José Ramón (PSPV), quien ha segurado que la mayoría de los vecinos participan en las peñas y que hasta ahora no ha oído “ninguna voz crítica contra el toro embolado”, por lo que en la población “no hay debate alguno sobre este tema”.
Ramón ha defendido que los toros en Borbotó son “una tradición antiquísima” y ha asegurado que la festividad no recibe subvenciones públicas.
Por otra parte, Ribó también ha comentado que si la Diputación de Valencia cediera a la ciudad la Plaza de Toros, se le daría un uso cultural o musical, pero no taurino. Aún así, ha asegurado que a día de hoy es algo que no se ha planteado.