Cuenta atrás para la zona verde de aparcamiento para residentes: el nuevo contrato de la ORA de València arranca este martes

El próximo martes, 11 de mayo, la empresa EYSA, adjudicataria del nuevo contrato de estacionamiento regulado de València, iniciará la prestación de su servicio.

Lo hará a través de los parquímetros que hay instalados ahora en la ciudad hasta que, progresivamente y de acuerdo con el pliego de condiciones y con la oferta realizada por la misma empresa, se vayan instalando los 195 nuevos parquímetros inteligentes que empezarán a funcionar, todos ellos a finales de junio.

Desde el próximo martes las personas usuarias podrán abonar su estacionamiento en zona regulada directamente en la app de la nueva adjudicataria, llamada Elparking, y que está disponible para todos los dispositivos móviles, aunque también podrán seguir realizándolo en la actual de Telpark, sin olvidar que también seguirá la opción de usar los parquímetros para el pago como hasta ahora.

Durante la transición entre concesionarias la disposición de plazas de la ORA en València se mantendrá en su actual situación, implementándose en los próximos meses las nuevas zonas verdes para uso exclusivo de residentes a medida que se atiendan las peticiones vecinales y se realicen los estudios pertinentes.

Tal y como informó elDiario.es, una de las principales novedades del nuevo servicio será la creación de 5.000 plazas de aparcamiento reguladas en superficie para residentes en los próximos cinco años.

Según explicó el edil el pasado mes de noviembre, la zona verde permitirá estacionar tan solo a los vecinos, los cuales deberán acreditarse como tal y pagar una tasa anual: “Se empezará por Ciutat Vella y Russafa porque ya hace tiempo que lo vienen solicitando los colectivos vecinales con los que ha habido diversas reuniones, pero se ampliará a otros barrios si los vecinos lo solicitan, también en función de lo establecido en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de València”, dijo Grezzi.

Aunque la cuantía de la tasa anual aún no es definitiva, los cálculos del Ayuntamiento estiman un coste de unos 80 euros al año, aunque se podrá abonar también de forma fraccionada en los mismos parquímetros, los cuales serán nuevos y de última generación, en los que se introducirá la matrícula del coche, lo que permitirá la aplicación de diferentes tarifas o bonificaciones en función del tipo de vehículo y las emisiones que genere. Las tarifas generales estarán en el mismo rango que las actuales.

El contrato tiene una duración de cinco años y se han previsto unos ingresos de 34 millones de euros (IVA incluido), de los que el 53,3% serán para el Ayuntamiento y el resto para la empresa adjudicataria. Con el anterior contrato aprobado en la época del PP, la empresa adjudicataria se quedaba el 62,7% de los ingresos.