Si fuera cierto aquello de que lo que mal empieza mal acaba, no pintaría nada bien el pacto sellado este viernes entre el PP y Vox para gobernar el Ayuntamiento de València, que se convierte en la corporación municipal más importante en la que la extrema derecha alcanza cotas de poder. Ni más ni menos que la tercera ciudad más grande de España.
Cuatro meses le ha durado a la alcaldesa del PP, María José Catalá, su aventura en solitario al frente del Ayuntamiento de València desde que fue investida el pasado 17 de junio en minoría con los únicos 13 votos de su grupo, a cuatro de la mayoría absoluta, justo los concejales que tiene Vox. Aunque la primera edil reconoció que ha habido conversaciones desde el primer día, ha sido esta semana con la necesidad de aprobar las ordenanzas fiscales y los presupuestos municipales cuando se ha acelerado la negociación.
Empieza mal porque la relación entre los dos líderes municipales de la derecha, la alcaldesa del PP, María José Catalá, y el ahora segundo teniente de alcalde de Vox, Juan Manuel Badenas, viene marcada y muy deteriorada por su etapa anterior como responsables de la Universidad Internacional de Valencia (VIU).
Fue en 2013 cuando Catalá, entonces consellera de Educación con el presidente popular Alberto Fabra, pilotó el proceso de privatización de la VIU de la que Badenas era el rector.
Como informó este diario, la ahora primera edil vendió el 70% de la VIU por cuatro millones de euros tras haber invertido el Consell desde su creación 34 millones de euros y su valor se multiplicó a los pocos días de seleccionar la oferta del grupo Planeta Planeta tras aprobar la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y la Acreditación (Aneca) nuevas titulaciones. Badenas acudió a un notario para denunciar “posibles irregularidades” que, en su opinión, “podrían causar perjuicio a los intereses” del centro docente y de la fundación de la que depende, “al Gobierno valenciano y al futuro inversor privado que entre a formar parte del capital de esta universidad”.
Ahora, 10 años después de aquel encontronazo, se vuelven a ver las caras como socios de Gobierno del Ayuntamiento de València. El acto de puesta de largo del bipartito del PP y Vox evidenció la incomodidad de la alcaldesa, quien en todo momento trató de evitar la clásica foto de los socios juntos rubricando el pacto, foto que por ejemplo no tuvo problemas en difundir el presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, con los líderes valencianos de Vox, Vicente Barrera y Carlos Flores. Catalá entró sola al Salón de Cristal del Ayuntamiento y no se juntó ni una sola vez con Badenas. Incluso respondieron por separado a las preguntas de los periodistas. Tampoco posaron juntos en la foto de familia con el resto de concejales y concejalas, ya que la edil y mano derecha de Catalá, María José Ferrer San Sagunto, se interpuso.
Catalá, quien sigue ocultando lo que ha venido cobrando como profesora de la VIU y no ha confirmado si seguirá ejerciendo la docencia en el presente curso, trató de quitar hierro a lo sucedido en el pasado en la institución académica y se esforzó en vender una relación cordial entre ambos: “A Juan Manuel lo conozco hace tiempo, pero creo que nunca habíamos hablado tanto como en estos cuatro meses. Nos conocimos en un momento en el que el Gobierno valenciano adoptó una decisión sobre una universidad que formaba parte de la Generalitat. El presidente Fabra adoptó la decisión de meter capital privado en esa universidad y ya no pudimos compartir mucho tiempo más”.
El pacto, además, no incluyó el clásico acuerdo programático con las líneas maestras a desarrollar en los próximos cuatro años que permitan vislumbrar un proyecto de ciudad.
Sin embargo, arrojaron dudas sobre eventos que tiene en cartera la ciudad conseguidos por el anterior equipo de izquierdas como los Gay Games (la competición internacional de carácter deportivo que València acogerá en 2026). Al respecto, Catalá comentó que ha hecho “un comité organizador”. “Estamos en una fase muy preliminar de ese proyecto y vamos a seguir hablando de eso con absoluta tranquilidad. Daremos las comunicaciones oportunas cuando corresponda”, dijo.
Badenas, por su parte, dijo que su posición sigue siendo la misma: “Me parece que lo que debería haber son unos juegos para todos. Y cuando tiene que ser juegos y deportes para todos no hay que poner etiquetas. A lo mejor, no es afortunada la denominación si en este evento deportivo se puede participar con independencia de la tendencia sexual”, comentó, sin aclarar la postura que mantendrá.
Sobre la Capitalidad Verde Europea que ostentará València en 2024, la alcaldesa dijo que esta “depende de una dirección general de Alcaldía”, tras lo que aseguró que “no cabe duda” de que se trabajará “de la mano de Juanma (Badenas) y de todos los concejales de Vox, que prácticamente todos tienen competencias en esta materia”, así como “de la mano de una área” que ha calificado de “fundamental” como la de “Proyectos Europeos que lleva Paula Llobet (PP)” y que “tiene mucho que aportar”.
Vox gestionará Playas y Albufera
El ejecutivo de València cuenta desde este viernes con una nueva estructura tras el pacto de gobierno entre PP y Vox. Este equipo pasa de tener 13 ediles y de dirigir la ciudad en minoría a estar integrado por 17 concejales a partir de la incorporación de los 4 representantes de la extrema derecha.
Vox se hace cargo del área de Empleo, Emprendimiento y Formación, con la Delegación de Empleo y Formación, para su portavoz, Juan Manuel Badenas; y la Delegación de Emprendimiento que pasa a manos de la edil Cecilia Herrero.
El área de Parques y Jardines y Espacios Naturales es también para los nuevos socios del ejecutivo, con la Delegación de Parques y Jardines, que dirigirá Badenas; la de Devesa-Albufera, que queda en manos de José Vicente Gosálbez; la de Playas, que pasa a Mónica Gil, y la de Agricultura con Cecilia Herrero al frente.
Además, Vox llevará el área de Familia, Mayores y Tradiciones. En ella está la Delegación de Familia, Juventud e Infancia, con Mónica Gil; la Delegación de Mayores, con Gosálbez, que también asume Sanidad y Consumo. Fiestas y Tradiciones queda en manos de Mónica Gil.