Primera concentración tras el auto de la Audiencia, “la justicia nos da la razón”
Este lunes, 3 de febrero, se volvían a concentrar, como cada mes, las víctimas del accidente de metro de Valencia de 2006, en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas, en la plaza de la Virgen para celebrar, en esta ocasión que “la justicia nos da la razón tras más de siete años de esfuerzo denunciando que no se había investigado suficiente”.
Desde la asociación (AVM3J) recuerdan que la principal prueba del caso, el vagón del tren, fue destruida previa autorización de la jueza Nieves Molina pese a que había recursos pendientes, “cuando los aceptó, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) contestó que los había destruido”.
Las víctimas apuntan que el auto de la Audiencia de Valencia del pasado 21 de enero, en el que se decide reabrir la investigación, “demuestra que teníamos razón y que no se investigó, sin embargo, nuestro gobierno sigue mirando hacia otro lado”, a pesar de que aseguran que “siempre” han estado “del lado de las víctimas”.
Manifiesto
En la concentración, en la que como cada mes participaron centenares de personas que volvieron exigir justicia, desde la AVM3J mostraron su satisfacción por este “primer paso para saber la verdad, para que se haga justicia”.
Así, insisten en que la instrucción realizada en 2006 “no fue completa, ni rigurosa, se ciñó única y exclusivamente en la velocidad y dejó fuera de la investigación muchas premisas que pudieron causar el accidente”. Ahora, la Audiencia de Valencia sentencia que “ante la más mínima duda, hay que agotar la investigación, buscando la verdad...”, unas declaraciones que “reconfortan” a las víctimas.
Un texto que reza: “La vida, y la muerte en mayor medida, necesita de una respuesta adecuada, respetuosa, objetiva, independiente y proporcionada por parte de la Administración de Justicia,... y los jueces y magistrados han de intentar por todos los medios satisfacer, en la medida de sus posibilidades, a los ciudadanos que acuden a la misma, solicitando ni más ni menos que Justicia”, aunque, lamentan, “la jueza no piense así”.
Desde luego, afirman desde la AVM3J, “nosotros no vamos a parar hasta tener alguna respuesta”.
No habrá cambio de juez
El decano de los jueces de Valencia, Pedro Viguer, recordaba este lunes que la normativa impide que se cambie, a petición de los denunciantes, al juez asignado a un caso, dado que “contravendría las normas” y sería “frontalmente contrario a la Constitución”.
Molina había archivado la petición de ampliación de investigación del caso -ante nuevas pruebas que habían ido saliendo a la luz-, y tanto la Fiscalía como la AVM3J habían recurrido esa decisión ante la Audiencia de Valencia, que revocó ese auto y ordenó la práctica de once nuevas diligencias.
La asociación considera que la jueza Molina “no ofrece las garantías necesarias” y “está contaminada” para proseguir con la instrucción de la causa, ya que la archivó con anterioridad.
El decano ha manifestado que la instructora de la causa “es la predeterminada por la ley y la que corresponde a las normas procesales”, por lo que, si se solicitara su sustitución, “contravendría las normas” e iría “frontalmente contra la Constitución”.
“No se puede cambiar jamás. Se iría en contra de las normas. No cabe lo contrario”, ha dicho, mientras que sobre las críticas a la instructora ha agregado: “Hizo su trabajo y lo hizo perfectamente. Es una magnífica profesional y resolvió lo que consideró oportuno”.
Que se pida perdón públicamente
Desde el PSPV, Francesc Signes ha denunciado el “gran pacto de silencio” de los tres consellers de Infraestructuras que han ocupado el cargo en estos años -José Ramón García Antón, Mario Flores e Isabel Bonig- y de los dos presidentes de la Generalitat -Francisco Camps y Alberto Fabra- para “ocultar la verdad del accidente” durante estos siete años, ya que, asegura que ni en la Comisión de Investigación ni en el primer juicio “se aportaron todas las pruebas”.
A juicio de Signes, los gerentes de FGV en este tiempo “no han actuado y ocultado información por su cuenta, sin el beneplácito y consentimiento de los conseller”, por lo que insiste en que es necesaria, “más que nunca”, la reapertura de una nueva comisión de investigación en Les Corts -una medida que desde el Consell descartan, “no es el momento”- al tiempo en que insiste en que seguirán exigiendo responsabilidades políticas por lo sucedido así como que se pida perdón públicamente a las víctimas.