Tres mochilas para viajar ligeros que caben en la cabina de un avión
Maleta o mochila, la mayoría de nosotros solemos optar por una maleta de ruedas para desplazarnos en nuestros viajes vacacionales, seguramente porque vamos a estar en un lugar fijo y vamos a consumir muy pocos hospedajes.
Pero si estamos en un viaje de ruta, por ejemplo fuera de la Unión Europea, con varios vuelos internos o entre diferentes países, así como partes del trayecto en autobús o en tren, siempre es mucho más cómodo tener una mochila, o un híbrido entre la maleta y la mochila, que nos podamos colgar de la espalda para cuando tengamos que hacer travesías más o menos largas.
En estos casos, especialmente si vamos a Latinoamérica en la zona más tropical o al sudeste asiático en los que, además, la cantidad de ropa que llevaremos será parca debido al calor, estas maletas-mochilas nos harán un gran servicio, puesto que no necesitaremos cargarlas a tope y no cargarán excesivamente nuestra espalda.
La mayoría de estas mochilas tienen las medidas justas para pasar como equipaje de cabina en un avión. Esto es: 55 cm de altura por 33 de ancho y 20 cm de profundidad. Están, además, provistas de numerosos bolsillos y ranuras para guardar desde ordenadores a documentos, linternas o cualquier objeto que vayamos a necesitar en nuestro viaje o travesía.
Y tienen un espacio central en el cual puede caber una cierta cantidad de ropa, que dependerá del tipo de mochila que escojamos, así como ordenador y otros dispositivos electrónicos. Adicionalmente, los modelos de precio más elevado y más completos, contemplan ruedas para poder desplazar por el suelo la maleta, así como el bastón extensible que no servirá para tirar de ella.
A continuación, te recomendamos tres de estos modelos perfectos de mochilas para tus viajes más movidos.
En calidad y precio es quizás la mejor mochila para adquirir, si no fuera porque no posee ruedas para hacerla rodar en superficies lisas. Sus medidas son las de una maleta de cabina, y en su interior dispone de múltiples departamentos en los que colocar los diferentes objetos que nos vayamos a llevar de viaje.
Muy completa y cómoda, se puede utilizar el modo mochila o bien en modo maleta con una alargada banda que nos podemos colgar del hombro. Gracias a su cubierta de textil de Oxford, es resistente al agua y al polvo y se lava fácil, así como es rígida ante los golpes, si bien cuando está vacía se muestra flácida y fácilmente plegable.
Otra mochila de altas capacidades, ya que tiene un volumen máximo de 50 l, con numerosos departamentos para colocar todo tipo de artículos, dispositivos, documentos, etc. También dispone de su compartimento para poder guardar toda la ropa que deseemos. El exterior es de textil de Oxford y gabardina, resistente tanto al agua como al polvo y la suciedad.
Aquí donde la vemos, esta maleta con poco aspecto a priori de mochila, tiene unas abrazaderas traseras perfectas para colgárnosla de la espalda. De este modo, suma sus ruedas a la calidad de su tela y a su ergonomía. Dispone, además, de un sistema de cierre por contraseña.
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