Bogotá, 1 sep (EFE).- El Ciclo de Cine Rosa de la Cinemateca de Bogotá, que este año cumple dos décadas fomentando la representación de disidencias sexuales y de género en la pantalla grande, presentará del 3 al 19 de septiembre una programación que invita al diálogo y al respeto por la diversidad.
“Este ha sido un espacio que ha posibilitado visibilizar las luchas que la comunidad LTBTIQ+ ha tenido que enfrentar para dignificar sus prácticas artísticas y culturales, su existencia misma, su libertad de expresión”, destaca en una entrevista con Efe el gerente de la Cinemateca de Bogotá, Ricardo Cantor.
En su vigésima edición, el Ciclo Rosa -que surgió en 2001 por iniciativa de la Cinemateca de Bogotá, escenario del Instituto Distrital de las Artes de la capital colombiana (Idartes), el Goethe Institut, el Centro Colombo Americano de Medellín y la Universidad Javeriana- presentará una muestra en retrospectiva con películas emblemáticas proyectadas en sus 20 años.
“Vamos a tener largometrajes que han sido muy significativos en estas dos décadas del ciclo por asistencia y por buena recepción del público”, detalla Cantor sobre la programación en la que se presentarán películas como “O Fantasma”, del portugués João Pedro Rodrigues, o “Nitrate Kisses”, de la directora de cine experimental estadounidense Barbara Hammer.
UN FESTIVAL DE CINE PARA DIALOGAR
El Ciclo Rosa se ha convertido en sus 20 años en una plataforma de debate oportuna para la transformación, tanto estética como narrativa, de estereotipos y falsas percepciones de lo que significa la diversidad sexual y de género.
Igualmente, para Cantor, el festival ha propiciado reflexiones, “casi que teniendo el cine como excusa” y a través de su componente académico, “que ha sido igualmente importante”, para “intercambiar ideas sobre la importancia de no evadir diálogos alrededor de las luchas de la comunidad” LGBTIQ+.
De la programación en la Cinemateca de Bogotá harán parte dos curadurías internacionales invitadas: una de la cineasta y artista argentina Albertina Carri, que presentará tres largometrajes y dos programas de cortometrajes, y otra del director del festival Mix Brasil, Joao Federici, compuesta por 10 películas sobre las conquistas y el terreno que ha perdido la comunidad.
“El Ciclo Rosa comparte desafíos de la comunidad misma, la lucha por sus derechos, la dignificación de sus expresiones, de las libertades de sus cuerpos, la diversidad sexual”, destaca Cantor.
UN CICLO INTERDISCIPLINAR
En sala también serán proyectados los documentales “Les otres: historia del movimiento LGBT+ en Colombia”, de la directora colombiana Luisa Orozco, “Cassandro, el exótico”, de la cineasta y curadora francesa Marie Losier, y “Entre nosotras”, del director italiano Filippo Meneghetti.
Esta edición además cuenta con un componente interdisciplinar; tres conversaciones sobre la programación del ciclo; una muestra nacional, integrada por cortometrajes colombianos; la presentación del Premio Dunkel Rosa en articulación con el Goethe Institut, y actividades al aire libre.
“El cine LGBTIQ+ a veces por su contenido abierto, sin filtro, explícito, con muchas libertades de lenguaje y de cuerpos, ha sido llevado a la censura en sus propios territorios y países, pero el Ciclo Rosa siempre ha estado abierto a la circulación de estos contenidos a través, por supuesto, de procesos de curaduría”, reconoce Cantor.
El Ciclo Rosa, que también busca promover espacios de no discriminación y violencia contra la población LGBTIQ+, cuenta con el apoyo del Museo La Tertulia, la Cinemateca de Medellín, el Bogotá International Film Festival y las embajadas de Argentina y Francia en Colombia.