Un nuevo retraso en la gestión de los fondos europeos para las artes escénicas pone “la soga al cuello” al sector

Elena Cabrera

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El INAEM no dispone del elevado volumen de recursos humanos necesario para gestionar las ayudas a las artes escénicas de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia correspondientes a 2021-2022. Por ello, ha tenido que ampliar por segunda vez el procedimiento, según ha informado este instituto dependiente del Ministerio de Cultura el pasado miércoles.

El plazo para resolver las ayudas europeas vencía el 24 de octubre pero el INAEM admite que va con retraso no solo por la falta de personal y la gran cantidad de material que es necesario manejar para evaluar los proyectos sino también “una serie de incidencias técnicas en la sede electrónica” que han impedido a los solicitantes aportar la documentación que se pedía en las subsanaciones y acceder a la documentación previamente aportada.

Ahora, el plazo para la resolución de las ayudas se ha ampliado hasta un máximo de tres meses, es decir, hasta el 21 de enero. Durante dos días, el sector ha estado preocupado y molesto porque en el primer borrador publicado el miércoles no se indicaba que, con este dilación, también se trasladaran hacia el futuro los plazos para la ejecución y justificación de los proyectos subvencionados. Finalmente este viernes, con la publicación de una nueva nota informativa, el INAEM ha indicado que estas fechas también sufren un retraso de tres meses. De tal manera, el plazo de ejecución se situaría a finales de marzo y el de presentación de la justificación, a finales de mayo.

“Dentro de lo que es la situación, es una buena noticia”, indica Valeria Cosi, presidenta de la Federación Estatal de Compañías y Empresas de Danza (Feced). La situación a la que refiere es los plazos son ya de por sí muy ajustados y que el sector de las artes escénicas, formado por pequeñas compañías precarizadas y con presupuestos ajustados, viven en la incertidumbre.

Fuentes del INAEM indican que la institución intentará no apurar el plazo al máximo y conseguir durante la primera quincena de noviembre la resolución de este paquete de ayudas, que van destinadas a modernizar las estructuras de trabajo, generar empleo y desarrollar actividades que van más allá del hecho escénico, como la implementación de herramientas tecnológicas o la comunicación online. Esto puede ser desde crear una página web o contratar una persona en la compañía para este tipo de labores.

Segunda tanda de ayudas

Habrá alguna gran compañía de teatro o danza que pueda adelantar el dinero pero la configuración del sector es una amplia cantidad de pequeñas compañías que viven al día y no pueden ejecutar un proyecto o una mejora estructural sin saber seguro que recibirán el dinero y que llegará en un corto plazo. “Entendemos el desborde del INAEM y la dificultad de trabajar con poco personal, pero necesitamos que se resuelva pronto porque el sector lo estamos pagando muy caro”, añade Cosi. “Estamos en una situación fuera de lógica”, añade.

Las preocupaciones del sector se acrecientan ante la perspectiva de la siguiente tanda de ayudas, las que corresponden a 2022 y que deberían convocarse en diciembre.

Siete plataformas que agrupan al sector de las artes escénicas, tanto en teatro, danza como circo, han remitido este viernes una carta al director general del INAEM, Joan Francesc Marco, y al ministro de Cultura, Miquel Iceta en el que se les reprocha que esta ampliación de plazo no se les comunicara a los solicitantes de la ayuda directamente, “lo que resulta, por lo menos, sorprendente, dada la larga espera a la que se les está sometiendo y la compleja situación en la que se les ha colocado por el inaudito retraso que lleva la tramitación de estas ayudas”, expone la carta. La publicación de la ampliación tampoco se comunicó a las asociaciones del sector previamente.

Las asociaciones que firman la carta (Acieloabierto, ADGAE, Circo Red, FEECSE, Patea, Red de Teatros Alternativos y FECED) indican que “unas ayudas que fueron pensadas para fortalecer las estructuras del sector no deben ni pueden convertirse en una soga al cuello para ellas y en la puntilla para su precaria condición económica por unos motivos como la falta de medios y las incidencias técnicas del Ministerio y el INAEM”, señalan en su carta al ministerio.