El escritor Arturo Pérez-Reverte ha hablado hoy en Cádiz sobre los resultados de los últimos comicios, y ha subrayado: “Esos políticos superimputados que hayan salido casi igual que antes demuestra la baja calidad moral en la que los españoles están viviendo”.
Durante la presentación de su última novela, 'Hombres buenos', Pérez-Reverte ha indicado que cree que “aún así se ha notado el cambio, se ha notado que no todos éramos borregos” y que “ahora al ser tantos les costará más ponerse de acuerdo para robar”.
“La decencia debería ser imprescindible para cualquier político”, ha asegurado el académico, para quien “todavía hay en las listas electorales sinvergüenzas, supergolfos conocidos y notorios en un montón de sitios, con juicios, con hechos probados, con robos flagrantes que han estado de nuevo en las listas y además los han votado otra vez”.
“Un político que ha tenido un desliz por muy débil que sea no deberían obligarlo a dimitir porque él dimite por dignidad personal. Eso, que es normal en otros países como Dinamarca o Alemania, aquí no lo es. Esto demuestra que a veces tenemos lo que nos merecemos. A veces tenemos la basura porque esa basura sale de nosotros mismos”, añade.
Con más de quince millones de ejemplares vendidos en todo el mundo y treinta años de trayectoria literaria, el autor confiesa que este ejemplar, que va ya por su sexta edición, ha sido “un ejercicio de terapia personal”, un “analgésico” con el que se ha sentido “mejor, casi bueno”.
“Esta novela me ha reafirmado en la idea de que sólo la cultura nos salva. En tiempos como estos de basura indiscriminada, de falsos profetas, de lobos disfrazados de corderos únicamente el criterio de la persona culta, el joven que se educó desde niño con un buen maestro, en el criterio y en la cultura, permite salvarse”, ha añadido.
Pérez-Reverte, que cierra en la capital gaditana una serie de presentaciones públicas del texto que ha hecho en otros lugares de España, dice no creer ya en “la salvación colectiva”: “Europa y Occidente se han ido al diablo. Aquí hay una degeneración colectiva sin salvación”.
Aunque ha matizado que cree que “la gente buena aún tiene mecanismos de salvación que son los libros y la cultura” que, aunque no puedan evitar la tragedia nos pueden ayudar a sobrellevarla“.
“Los hombres buenos de hoy en día son los maestros. El maestro con un buen libro en la mano, con amor en su trabajo, no mercenarios de la tiza, sino que intenta hacerlos críticos, lúcidos y sabios”, ha asegurado.
'Hombres buenos' es “una novela sobre los libros y la amistad, sobre patriotas culturales” y, sobre todo una lectura de un tiempo pasado que “vale para el hoy, vale para entender el presente”.
“Cuando leía extraía conceptos y me di cuenta de que buena parte de esos argumentos valen para hoy. Sin yo buscarlo tiene un plano actual muy intenso. Nos sirve para entender, a los europeos y a los españoles por qué somos como somos y sobre todo lo que pudimos llegar a ser” y se ha preguntado: “¿Por qué España ha perdido tantas veces el tren de la modernidad”.
El académico también ha defendido el poder de la cultura como un filtro necesario del individuo para discernir. “El problema de Internet es el exceso de información y la falta de elementos discriminatorios. Tanto cuenta el peso o más de Belén Esteban, de Kiko Rivera que el de Vargas Llosa que el de Pérez-Reverte o el de Javier Marías. No hay un filtro que diga esto es interesante y esto es basura”, ha añadido.