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Takeshi Kitano: estoy cansado de la violencia, voy a hacer otras cosas
El realizador japonés Takeshi Kitano aseguró hoy en Venecia que está “cansado” de la violencia que caracteriza sus filmes desde hace años. “De ahora en adelante quiero hacer cosas diferentes”, agregó.
Entre ellas, la adaptación de una novela de amor que se presentará el 20 de septiembre en Japón y de la que no dio el título, aunque sí precisó que tratará de ser “lo más fiel posible al texto”, pero que no quiere cambiar su estilo cinematográfico.
Un estilo muy directo, con fuertes toques de humor negro y en el que trata de reflejar de forma colateral el funcionamiento de la sociedad japonesa, como explicó del filme que presentó hoy en la Mostra de Venecia y que sirvió para clausurar su 74 edición.
Se trata de “Outrage Coda”, exhibida fuera de concurso, el cierre de una trilogía que inició con “Outrage”, presentada en el Festival de Cannes en 2010, y que continuó en 2012 con “Outrage 2”, estrenada en la competición de Venecia.
Al igual que en las dos entregas anteriores, el realizador japonés no ahorra violencia en esta historia de yakuzas en la que Kitano vuelve a interpretar a Otomo, un exmiembro de esa mafia japonesa, instalado ahora en la isla surcoreana de Jeju.
Aunque también ha introducido elementos que muestran una cierta humanidad en el seno de esas bandas violentas, lo que se aleja un poco de las dos primeras y más sangrientas partes de esta trilogía.
Una trilogía con la que quiere cerrar los años dedicados al cine violento y hacer películas diferentes, algo que ya hizo en el pasado, con historias de una gran delicadeza como “El verano de Kikujiro” (1999) o “Dolls” (2002).
Así como la intensa “Hana-bi. Flores de fuego” (1997), por la que se llevó el León de Oro de Venecia en 1997, un festival en el que ha presentado a competición seis de sus películas y en el que también consiguió el premio a la mejor dirección por “Zatoichi” en 2003.
Es un festival que representa mucho para Kitano, que resaltó hoy que recibir el León de Oro fue para él un revulsivo para volver a retomar las riendas de su carrera.
“Había tenido un accidente muy grave y en el mundo del espectáculo en Japón se me consideraba un hombre acabado. Estaba muy deprimido, fue un momento muy difícil para mí”, explicó.
Además, sus primeras películas no habían tenido una buena acogida en Japón, donde era solo conocido por sus programas de humor en televisión.
Fue entonces cuando presentó en Venecia “Hanna-bi. Flores de fuego” y todo cambió. “Ese premio fantástico me dio el optimismo necesario para volver. Pude retomar mi carrera cinematográfica gracias a la Mostra”, aseguró un agradecido Kitano.
Una Mostra que cerrará esta noche su 74 edición con el anuncio del palmarés oficial, incluido el León de Oro al mejor filme, a cargo de un jurado presidido por la actriz estadounidense Annette Bening.
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