Así amañó la trama Blasco la adjudicación del sistema informático de los historiales médicos valencianos
La trama de corrupción del exconseller del PP Rafael Blasco fue más allá de las ayudas a Cooperación por las que terminó encarcelado. El juzgado de Instrucción número 6 de València persigue desde hace años y tras una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción las triquiñuelas que la red de empresarios y funcionarios que tejió en los departamentos por los que iba pasando. En este caso, en la Conselleria de Sanidad del gobierno valenciano, donde Blasco fue máximo dirigente entre 2006 y 2007.
Así, en esta etapa su empresario de cabecera y con quien en estos momentos comparte prisión por el saqueo de los fondos de Cooperación, Augusto César Tauroni, también consiguió desviar fondos públicos a sus sociedades. Según un documento al que ha tenido acceso eldiario.es y que forma parte del sumario, Tauroni se sirvió de empresas contratistas pantalla para conseguir contratos de su amigo político con la intención de no aparecer directamente en las adjudicaciones y los documentos.
Según el contrato privado revelado hoy, Tauroni utilizaba a la empresa contratista “limpia”, en este caso Dimensión Informática, aunque realmente era él a través de su empresa de cabecera Dinamiz-e quien estaba detrás de la operación. En el contrato se firma negro sobre blanco el presunto fraude. Dimensión Informática se compromete a subcontratar a Dinamiz-e en caso de ganar el concurso de la Conselleria de Sanidad que adjudicaba el conseller Rafael Blasco.
Era una manera de garantizarse por ambas partes la victoria en el proceso y cuando solo quedaban semanas para que Blasco abandonara la conselleria. El contrato se firmó el 16 de mayo de 2007 y el exconseller dejaba el departamento el 19 de junio. Los contactos de Tauroni harían el resto.
En este caso el contrato que emana de este contrato privado es el soporte informático del sistema epidemiológico pero antes Dimensión Informática había participado en la elaboración del Abucasis, el sistema que recoge los cinco millones de historiales médicos de los valencianos. El concurso lo ganaba la “limpia” Dimensión, pero detrás y en contratos similares estaba Dinamiz-e, según acreditan los diferentes currículums de empleados de la empresa de Tauroni en poder de este periódico y de la investigación.
Dimensión Informática recibió sólo en el año que estuvo Rafael Blasco al frente de la Conselleria de Sanidad hasta 7.492.280 euros. Tauroni, que ya se había visto envuelto en otros escándalos por adjudicaciones de consejerías dirigidas por Blasco en 2002, nunca concurría directamente a los concursos de Sanidad sino que lo hacía a través de la empresa que presidía Carlos Pujadas, el firmante del documento privado.
Dinamiz-e obtuvo grandes cantidades de dinero gracias a las subcontrataciones con Dimensión Informática, primero, y posteriormente con Indra, la multinacional que compró Dimensión Informática en el año 2008, justo dos días después de que ésta consiguiera un contrato de dos millones de euros por el mantenimiento del Abucasis.
Dimensión Informática recibió de la Conselleria de Sanidad, con Blasco ya en funciones, el contrato «para el desarrollo y soporte del sistema farmacoepidemiológico del Centro Superior de Investigación en Salud Pública». De este contrato público por el que la empresa de Carlos Pujadas percibió 1.618.200 euros, la sociedad de Tauroni recibió, según facturas en poder de este eldiario.es, hasta 450.000 euros.
Contratos millonarios antes de dejar Sanidad
Este contrato se aprobó el mismo día que otro para el «análisis, desarrollo e implantación del sistema informático de gestión del banco de muestras biológicas en el Centro de Investigación de Salud pública» por el que Dimensión Informática recibió en UTE otros 2.136.000 euros. Ambos se hicieron de urgencia y con Blasco en interinidad.
Es más, los dos contratos, que suman casi 3,5 millones, se otorgaron el mismo día, el 15 de junio de 2007. Para más coincidencia, se publicaron en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana el 28 de junio de 2007, justo el día antes de que tomara posesión su sucesor.
En las últimas semanas, el caso que investiga el juzgado de Instrucción número 6 de Valencia se ha reactivado tras la negativa a ser archivado que habían pedido tanto Rafael Blasco como Augusto César Tauroni, imputados ambos en esta causa. Se ha citado a nuevos testigos a declarar, entre los que se encuentran trabajadores de la Generalitat y empleados de las empresas participantes en los proyectos de Abucasis y otros. El expolítico del PP sigue en prisión y tiene pendientes otras dos piezas, la 2 y la 3, por la trama que saqueó las ayudas públicas valencianas a la cooperación internacional