Ante el aumento de las llegadas de migrantes a las costas canarias, el Gobierno ha abierto alrededor de 5.000 plazas de emergencia en distintos puntos de España durante los dos últimos meses, según ha explicado José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, durante su visita al Centro de Recepción, Atención y Derivación (CREADE) de Pozuelo de Alarcón (Madrid). Como ya hizo el Ejecutivo para alojar de urgencia a los refugiados ucranianos, esas 5.000 camas extras para personas trasladadas desde Canarias se encuentran albergadas en hoteles -cerrados por la época del año-, mientras el Ejecutivo ultima la apertura de los campamentos temporales en tres terrenos militares cedidos por Defensa.
Tras las declaraciones alarmistas por parte de distintos alcaldes y líderes autonómicos del Partido Popular, Escrivá ha visitado este lunes el CREADE de Pozuelo, el centro de referencia para refugiados ucranianos en la Comunidad de Madrid, que desde hace meses aloja a personas de distintas nacionalidades. Entre ellos se encuentran 250 migrantes trasladados de Canarias en las últimas semanas -la mayoría senegalesas-, cuya llegada despertó la reacción xenófoba de la alcaldesa de Pozuelo, que pidió un “refuerzo de seguridad” en las zalles de la zona.
El ministro ha explicado el operativo activado para gestionar el aumento de llegadas a las Islas. Si hace dos meses el sistema contaba con 38.000 plazas de acogida, ahora tiene 43.000. A medida que el Ministerio vaya abriendo los nuevos campamentos de emergencia, las personas alojadas en hoteles, hostales o albergues irán siendo trasladadas a los espacios levantados en tres terrenos militares de la península, que acogerán a alrededor de 3.000 personas.
El primero en abrir sus puertas, la semana que viene, será el cuartel General Arteaga, ubicado en Carabanchel (Madrid), que podrá albergar hasta 1.200 plazas si es necesario desplegar su capacidad máxima y estará gestionado por Cruz roja. A finales de esa misma semana, Migraciones planea enviar a las primeras personas al antiguo hospital naval de Cartagena. La ONG Accem estará a cargo de este campamento, que contará con 600 camas. Más adelante, también en noviembre, le llegará el turno al cuartel Primo de Rivera en Alcalá de Henares (Comunidad de Madrid), que podrá recibir a un máximo de 1.200 personas.
“Pensamos que podremos ir trasladándolos a estos campamentos que son más adecuados, como ya hicimos en Canarias en su momento”, ha detallado Escrivá, quien ha recordado que su Ministerio también utilizó hoteles y hostales para acoger temporalmente a 10.000 refugiados ucranianos en 2022.
“Estamos ya acostumbrados a gestionar situaciones difíciles, con flexibilidad, con una visión integral de todo nuestro sistema de acogida en todo el territorio nacional. Y eso es lo que estamos haciendo en esta ocasión. Es verdad que la llegada persistente de personas de que vienen de Canarias, donde la situación se ha hecho un poco, ha habido que aliviar la situación, lo que nos está haciendo ampliar el número de plazas”, ha explicado el ministro.
El ministro ha convocado este martes una reunión informativa con los alcaldes de los principales municipios españoles, a la presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, María José Pelayo, y a los consejeros de las comunidades autónomas tras las críticas lanzadas por diversos alcaldes y presidentes autonómicos, sobre la supuesta falta de información recibida sobre la llegada de migrantes trasladados desde Canarias. Escrivá ha recordado que ha esperado a “tener la suficiente información para compartir” con los ayuntamientos y las comunidades autónomas.
Además, el responsable de Migraciones ha recordado la diferencia entre el tipo de acogida de los refugiados ucranianos, donde sí se requería una mayor coordinación con los municipios y comunidades, y la de los migrantes trasladados desde Canarias. “En el caso de Ucrania han llegado a ser 200.000 personas con visos de permanencia largo y por lo tanto, con presión sobre los servicios sanitarios y los servicios de educación, porque llegaron 80.000 niños que había que escolarizar y desde el principio pues trabajamos con las comunidades autónomas y colaboramos con ellos”, sostiene Escrivá. “Esta situación es completamente distinta. Son personas cuya estancia media en nuestro sistema de acogida supera ligeramente el mes y muy pocos de ellos se quedan en los sitios donde llegan. Por lo tanto, no hay una gran necesidad de reforzar la atención con otros servicios que no sean los de nuestra propia acogida”.
La reunión de este martes, que se realizará por videoconferencia a partir de las 17 horas, tiene un objetivo meramente informativo, según Escrivá, quien considera que muchas de las reacciones surgidas entre distintos alcaldes y presidentes autonómicos se ha debido al “desconocimiento” con respecto al funcionamiento de la política de acogida en España.
“Hemos ido percibiendo por declaraciones distintas que se han ido produciendo desde distintas instancias durante las últimas semanas que hay un enorme desconocimiento sobre cómo funciona nuestro sistema de acogida y cómo operamos”, ha criticado. “Les voy a explicar durante la reunión de mañana cómo funciona el centro de acogida, porque me da la sensación que ha habido muchos cambios en los gobiernos y quizá no lo conocen bien quienes han llegado nuevos”.
El ministro también dará detalles de dónde se encuentran el despliegue de nuevas plazas en respuesta a la emergencia. Escrivá ha matizado que se podrán evaluar procedimientos de cooperación “cuando realmente tengamos constancia de que esas personas se van a quedar en los municipios o las comunidades autónomas”.
“En la mayoría de los casos son personas que pasan muy poco tiempo a nuestro centro de acogida porque sus expectativas son otras. Sus expectativas son buscar enseguida zonas de arraigo, zonas de familiares, zonas donde tienen mayor capacidad para iniciar una nueva vida en, yo diría en España o en Europa”, ha concluido el ministro.