Hungría pide a la UE que pague la mitad de su valla fronteriza por “solidaridad”
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha pedido a la Unión Europea 400 millones de euros para financiar “la mitad” de los gastos derivados de su polémica política fronteriza, incluida la alambrada construida en la frontera con Serbia en 2015, en plena crisis humanitaria de refugiados.
A través de una carta dirigida al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, el primer ministro Viktor Orban ha afirmado que las alambradas que comenzó a construir en 2015, en plena crisis humanitaria de refugiados, “protegieron a toda Europa” de la llegada irregular de migrantes por lo que, afirma, Europa debe mostrar “solidaridad” con la cuestionada política fronteriza de Hungría.
De esta manera, en una conferencia de prensa, el jefe del gabinete de Orbán, János Lázár ha asegurado que la UE debería pagar el 50% de los 800 millones de euros gastados en su entramado fronterizo. “La solidaridad europea también debería mostrarse en la práctica”, ha afirmado.
Según ha añadido, “Hungría está protegiendo a todos los ciudadanos de Europa de la inundación de inmigrantes ilegales”.
Hungría comenzó a construir vallas fronterizas en su frontera con Serbia, un país no perteneciente a la UE, en 2015 durante la mayor crisis humanitaria de refugiados tras la segunda guerra mundial sin contar con el apoyo de la Unión Europea.
Su política fronteriza ha sido el foco de numerosas críticas, más allá de la construcción de las barreas físicas. En marzo de este año, el Parlamento húngaro aprobó una controvertida ley que hace posible la detención en centros cerrados de todos los solicitantes de asilo hasta que se resuelva su petición. Según Acnur, este tipo de legislaciones “viola las obligaciones de Hungría con respecto al derecho internacional y las normas de la Unión Europea”.