Moussa Marega, jugador franco-maliense del Oporto, ha abandonado este domingo el campo de juego tras recibir insultos racistas durante todo el partido. La afición del equipo rival, el Vitoria de Guimaraes le gritó desde la grada “mono” y entonó cánticos racistas hasta que en el minuto 71, después de haber marcado el gol de la victoria, decidió abandonar el encuentro visiblemente enfadado.
Parte de la afición del Oporto comenzó a corear el nombre de Marega al darse cuenta de que intentaba abandonar el campo y varios jugadores de ambos equipos trataron de convencerle para terminar el partido contra el que fue su anterior equipo. Sérgio Conceição, entrenador del Oporto, realizó el cambio y sacó a Wilson Manafa en su lugar. Finalmente, Marega abandonó el partido dirección los vestuarios haciéndole una peineta a la grada. Le acompañaban varios miembros del equipo técnico.
Unas horas más tarde, el jugador colgó una foto del momento en el que dejaba el campo y escribió: “Solo me gustaría decirles a estos idiotas que vienen al estadio a realizar gritos racistas: 'que os jodan'. También agradezco a los árbitros no haberme defendido y haberme sacado una tarjeta amarilla porque defiendo el color de mi piel. ¡Espero no volver a veros en un campo de fútbol otra vez! ¡Sois una vergüenza!”
En la rueda de prensa posterior al encuentro, el entrenador del Oporto se mostró muy indignado por lo sucedido en el campo y afirmó que la afición del Vitoria no se ve reflejada en las actitudes de las personas que insultaron a Mousa. Y añadió que el Oporto es una familia independientemente del color o la raza de cada uno.