El Premio Princesa de Asturias de los políticos

¿Wikipedia ha obtenido el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional? Puede sorprender pero, más allá de la idea transmitida en su título, el objetivo del galardón es recompensar una contribución “ejemplar y relevante al mutuo conocimiento, al progreso o a la fraternidad entre los pueblos”. Este miércoles el jurado ha fallado en favor de la enciclopedia digital editada de forma colaborativa en unos galardones que acumulan receptores de perfiles tan variados como las becas de excelencia Fulbright, Nelson Mandela, la Cruz Roja, activistas por los derechos humanos y, sobre todo, políticos. Un vistazo al listado completo refleja ciertas variaciones en los criterios de selección, que en ocasiones se desmarcan de la supuesta finalidad del reconocimiento.

Cerca de la mitad de los premios de Cooperación Internacional han recaído sobre políticos. De las 35 ediciones celebradas, 19 han tenido entre sus galardonados a políticos. Esta es la característica más repetida de la lista total, a la que también se se suman activistas, ONG u organizaciones científicas. Atendiendo al criterio histórico del jurado, los políticos son los que año tras año más han aportado “al mutuo conocimiento, al progreso o a la fraternidad entre los pueblos”.

Durante los primeros años del premio, de 1981 a 1985, el galardón recayó sobre la élite política latinoamericana de ideología conservadora y liberal. Lo inauguró José López Portillo, presidente de México entre 1976 y 1982. Bajo su mandato, falló el jurado, “se cerró para siempre el contencioso hispanomexicano, proceso que resulta fundamental para la Cooperación Iberoamericana”. Enrique Iglesias, fue presidente del Banco Central de Uruguay y, posteriormente del Banco Interamericano de Desarrollo. Se llevó la recompensa por su labor de “cooperación entre los pueblos iberoamericanos y la comunidad internacional”. El año siguiente, el que fue presidente de Colombia, Belisario Betancur, fue reconocido por “el compromiso de toda su vida con los valores permanentes del espíritu y de la cultura”.

Posteriormente, la regla se modifica, generalizándose un perfil más reconocido a nivel internacional, con la probable intención de que el premio tenga más repercusión fuera de España y el mundo latinoamericano.

En 1989 obtuvieron el premio Jacques Delors (presidente de la Comisión Europea entre 1985 y 1995) y Mijaíl Gorbachov (máximo dirigente de la URSS y artífice de la perestroika, 1985, Premio Nobel de la Paz en 1990). El año siguiente, fue el turno del ministro de Exteriores alemán, Hans-Dietrich Genscher. El exvicepresidente de EEUU Al Gore lo ganó en 2007 por su activismo en la lucha contra el cambio climático.

En 1998, el jurado se acerca al mundo de los derechos humanos con el premio a siete reconocidas activistas por “expresar simbólicamente en sus distintos campos de actividad el esfuerzo por mejorar la condición de la mujer y la del conjunto de las sociedades a las que sirven”. Emma Bonino, Olayinka Koso-Thomas, Graça Machel, Fatiha Boudiaf, Rigoberta Menchú, Fatana Ishaq Gailani y Somaly Mam. Una decisión que se desenmarcó del perfil político que ha acaparado buena parte de estos premios, como también ocurrió en otras ocasiones con mayor peso de la defensa de los derechos humanos o del desarrollo científico o cultural: Cruz Roja, Comisión Científica de Investigación de la Antártida, la Universidad de Salamanca y de Coimbra, las becas Erasmus, etc.

Otra extrañeza: si atendemos a los galardonados, resulta complicado apreciar la diferencia entre el Princesa de Asturias de Cooperación Internacional y el de la Concordia, que se podría asemejar al Nobel de la Paz, al recompensar a aquellos que “hayan contribuido de forma ejemplar y relevante al entendimiento y a la convivencia en paz entre los hombres, a la lucha contra la injusticia, la pobreza, la enfermedad, la ignorancia o a la defensa de la libertad, o que haya abierto nuevos horizontes al conocimiento”.

Nelson Mandela, Acnur, Cruz Roja/Media Luna Roja, activistas por los derechos de la mujer o la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre otros, obtuvieron en Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional. Cáritas Española, Médicos Sin Fronteras, Unicef, Adolfo Suárez o la Real Academia Española ganaron el de la Concordia.

Este es el listado completo de los premiados en la categoría de Cooperación Internacional:

Fuente: Wikipedia.