Asturias busca consolidarse como mejor destino turístico pese a la debacle de la pandemia

Es la región turística que mejor ha capeado el temporal de la COVID-19. En 2020 el Principado de Asturias recibió 1.263.161 turistas que a su vez generaron 3.526.442 pernoctaciones. En relación al año anterior, estas cifras suponen caídas del 46,4% y 38,8% respectivamente, y porcentajes que son menos desfavorables que los del resto de comunidades autónomas. En España, el descenso medio de turistas fue del 66,3% y 69,3% el de las pernoctaciones.

Así lo indica la Estadística de Movimientos Turísticos en Fronteras (FRONTUR), publicada por el Instituto Nacional de estadística (INE) esta semana. Un balance de “un año nefasto para el sector”, como lo entiende José Luis Álvarez Almeida, presidente de OTEA, la mayor patronal de hostelería y turismo del Principado. “Hemos sufrido una caída de la facturación y de las pernoctaciones enorme”, añade el empresario. La lectura de la la viceconsejera de Turismo de la región, Graciela Blanco, es bastante diferente: “Asturias se ha consolidado como el destino con mayor grado de seguridad para los turistas”.

Los datos son demoledores. En 2020, España recibió 19 millones de turistas frente a los 83,5 millones del curso anterior, según el INE. Según Exceltur, el peso del turismo en la economía española ha retrocedido al 4,3% del PIB, con una caída de 106 mil millones de euros de actividad. Los ingresos de los visitantes que revierten a España también se han desplomado.

En este caso se registra una bajada del 77% que se traduce en 55.393 millones de euros menos, según las cifras que recoge el informe de perspectivas turísticas publicado por Exceltur el 20 de enero. En otras palabras: el turismo nacional ha sufrido “un desplome sin precedentes”, como reza el estudio. Dentro de esta debacle, el Principado de Asturias se ha encomendado a un turista nacional en 2020 que iba en busca de un destino seguro, de naturaleza y libre de aglomeraciones.

“Reyes de los ciegos”

“No queremos la categoría de reyes de los ciegos”, comenta Álvarez Almeida, portavoz de OTEA, en alusión al refrán y a la “resistencia” de Asturias ante el coronavirus, donde la caída ha sido dura, pero no tanto como en otras regiones. En cifras: un descenso del 52,5% de turistas para los hoteles, 12% en campings, 32,7% en apartamentos turísticos y 36,4% en el turismo rural. En cuanto a las pernoctaciones, los hoteles registraron una bajada del 50,5%, los campings del 4,4%, los apartamentos turísticos del 22,4%, y los establecimientos rurales del 25,8%. En el conjunto nacional 13.879.794 personas se registraron en este conjunto de alojamientos, lo que supone un 79,7% menos que el pasado ejercicio.

Además de confirmar que estos datos sitúan al Principado como destino seguro, la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, ha avanzado que desde el Principado reforzará su “apuesta por la seguridad como factor determinante para la recuperación del sector a corto y medio plazo”. En este sentido, Blanco ha hecho referencia al informe de perspectivas turísticas de Exceltur que asume que “la comunicación en mercados emisores de la seguridad sanitaria de los destinos españoles, una vez controlada la situación epidemiológica, será un elemento clave para impulsar la recuperación”.

En el ámbito asturiano, el renacer del sector pasa por “mantener la imagen que se lleva construyendo muchos años; de seguridad, de calidad y de compromiso con el medio ambiente”, como explica Almeida. El presidente de OTEA considera que dentro de los nuevos estándares turístico que conlleva la era COVID, “Asturias puede salir reforzada”. Aun así, el empresario recuerda la situación precaria de los hosteleros y empresarios del turismo de Asturias y la falta de ayudas ante las restricciones. También sostiene que, para dicha recuperación, es imprescindible un “plan estratégico nacional”.

“Ayudas insuficientes”

“Las restricciones se combaten con ayudas”, sentencia Almeida. En primavera el Principado puso en marcha el Programa de Garantía y Reactivación Turística en Asturias, con acciones por más de 8 millones de euros para el sector. “Este plan permitió acometer desde medidas para incentivar el consumo a acciones para la mejora de la comercialización, además de la puesta a disposición del sector de acceso a financiación en condiciones preferentes”, según fuentes de la consejería.

Junto a estas actuaciones, el Gobierno de Asturias destinó el pasado mes de noviembre 19,6 millones en ayudas directas a autónomos y empresas para mitigar los daños de la pandemia. “De esta forma, en total, el apoyo económico movilizado por el Gobierno de Asturias en favor del conjunto del sector alcanza los 28 millones”, como informa el gobierno del Principado.

Sin embargo, “las ayudas se dieron durante 10 meses con una media de 2.000 o 3.000 euros para las empresas”, explica el presidente de OTEA considerando que las de entonces eran “insuficientes” y las de ahora “llegan tarde”. El gobierno de Asturias cuenta con 100 millones de euros para todos los sectores afectados por pandemia, de los cuales el 60% irán destinadas a la hostelería y turismo, como ha comentado Almeida, “después de la presión que ha ejercido OTEA”.

La patronal lleva en pie de guerra contra el gobierno regional desde septiembre. Al Ejecutivo nacional, la hostelería clama por un plan estratégico para el sector en toda España. “Crear corredores seguros, establecer pasaportes COVID para los inmunizados y ayudas directas”, son algunas de las propuestas que demandan los empresarios turísticos asturianos. “No estamos para perder ni un cliente”, concluye Álvarez Almeida.