El Banco de Inglaterra mantuvo este jueves los tipos de interés en el 0,10 % después de rebajarlos la semana pasada a ese mínimo histórico para afrontar la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus.
En su reunión periódica, el comité de política monetaria (MPC, en inglés) de la institución ha optado por no hacer más cambios en su estrategia para inyectar liquidez a la economía, después de haber tomado medidas de emergencia los días 19 y 11 de marzo.
El pasado jueves, el banco central recortó los tipos en el Reino Unido del 0,25 % al 0,1 %, el mínimo desde su fundación en 1694, y aumentó su programa de alivio cuantitativo para adquirir deuda pública y privada a 645.000 millones de libras (unos 705.000 millones de euros).
El 11 de marzo, ya había rebajado los tipos del 0,75 % al 0,25 % (entonces su nivel más bajo desde 2016), en una acción coordinada con el ministerio de Economía, que reveló a su vez un paquete de medidas para facilitar el crédito a hogares y empresas.
Al anunciar entonces el plan de choque, el Banco de Inglaterra manifestó que “el impacto” causado por el COVID-19 podría ser “pronunciado y largo” pero en última instancia “temporal”.
Hoy reconoció que existe “un riesgo de daño a la economía a largo plazo, especialmente si hay quiebras empresariales a gran escala y un aumento significativo del desempleo”.
Las restricciones impuestas para contener la propagación del virus han provocado un parón de la actividad económica a nivel nacional e internacional, con el consiguiente efecto para los ciudadanos y los negocios.
Además de las medidas del banco central, que revisará los tipos de nuevo el 7 de mayo, el Gobierno británico ha ofrecido pagar parte del sueldo a los asalariados de sectores obligados a cerrar y hoy anunciará ayudas para los autónomos.