El BCE encarece la ayuda de emergencia a Grecia
Aún con oxígeno pero con la mano de Mario Draghi en la llave que regula el nivel de corriente. El Banco Central Europeo ha decidido mantener el nivel de liquidez a la banca griega pero añadiendo más dificultad a la posiblidad de acceder a la financiación de emergencia. Según el comunicado del Consejo de Gobierno, aunque han decidido mantener la liquidez en 89.000 millones de euros le costará más a la banca griega conseguirla ya que se pedirá que pongan más deuda pública como garantía.
En términos de política monetaria, el Banco dice que a partir de ahora pedirá más colaterales (garantías) ligadas a los activos respaldados por el Gobierno. “El Consejo de Gobierno ha decidido ajustar los descuentos (haircuts) en los colaterales aceptados por el Banco de Grecia para el ELA -la línea de liquidez-”.
Santiago Carbó, catedrático de la Bangor University, explica que esto puede suponer una pérdida de solvencia para los bancos griegos, que tendrán que aportar más activos para obtener la liquidez.
Sin embargo, fuentes conocedoras de la operación aseguran que por el momento los bancos griegos cuentan con las garantías suficientes para que no empeore la situación actual.
La decisión de mantener el nivel de liquidez se puede interpretar como favorable, pero el aviso sobre los ajustes en la calidad de los activos como un aviso a navegantes (griegos) o una concesión a los halcones (Alemania, Holanda o Finlandia), presentes en el Consejo de Gobierno. Si el BCE hubiera decidido cortar la financiación se hubiera cargado el sistema bancario griego, y si hubiera decidido ampliarla hubiera ido contra su normativa interna, ya que Grecia no está ahora mismo en un programa de saneamiento.
Así las cosas, han optado por mantener, lo cual permite a los bancos griegos salvar los trastos un par de días más. No está claro cuantos días podrá sobrevivir con este nivel de liquidez. La patronal bancaria helena dijo que solo le quedaba para aguantar un día más pero otras firmas de inversión aseguran que aún podía resistir hasta “mitad de semana”.
Aunque aún no se ha publicado la nota oficial, parece que el Banco de Grecia también cree que las entidades griegas pueden sobrevivir hasta al menos el jueves con el mismo nivel de liquidez, por lo que el corralito se extenderá, previsiblemente, hasta ese día.
En principio, el BCE aguantará lo que pueda sin tomar una decisión drástica hasta que el Eurogrupo y el Consejo Europeo que se reúnen el martes 7 de julio avancen en las negociaciones con Grecia. Un principio de acuerdo facilitaría que el BCE pudiera aumentar la línea de liquidez y un distanciamiento podría producir que se encareciera aún más el acceso al crédito.
Medios extranjeros aseguran que dos miembros (de los 25) que conforman el Consejo de Gobierno pidieron que se impusieran medidas más restrictivas. En cualquier caso, la decisión no soluciona la situación al borde de la bancarrota del sistema financiero griego, y el BCE deberá seguir tomando decisiones similares en los próximos días.
La fecha límite en la que sin ninguna duda el BCE no podrá dar más liquidez es el próximo 20 de julio, cuando vence un pago al organismo de 3.500 millones de euros. El impago provocaría que se cerrara el grifo de golpe.