Chipre puede perder el 20% de su PIB en cuatro años

eldiario.es

La Comisión Europea y el FMI se han ocupado el lunes de hacer los pronósticos optimistas sobre la recuperación de la economía chipriota tras el plan acordado en la madrugada del domingo. Los analistas financieros y los medios de comunicación no son de la misma opinión. Varios análisis indican que Chipre caerá en una depresión que SocGen calcula que puede llegar a un descenso del 20% del PIB en los próximos cuatro años. “Esta previsión ya tiene en cuenta los acuerdos ya conocidos, pero no el impacto generado por las incertidumbres adicionales generadas por la increíble confusión política de la última semana”, dice SocGen.

El análisis, y no es el único en hacer este cálculo, cree que “con toda probabilidad exigirá asistencia financiera adicional en el futuro”. Al igual que en el caso de Grecia, y a pesar de que las declaraciones oficiales anuncian que el problema está solucionado, muchos creen que las medidas económicas de austeridad impuestas a Chipre agravarán su recesión, reducirán sus ingresos fiscales y acabarán con el modelo económico de la isla. Los depositantes extranjeros no tardarán en huir de los bancos de Chipre tras sufrir una “quita” no inferior al 30% y quizá superior.

A corto plazo, no podrán hacerlo. Uno de los puntos del acuerdo consiste en imponer controles al movimiento de capital, una situación insólita en la eurozona. La gran incógnita es saber cuánto tiempo durará esta medida excepcional. Una vez más, la versión oficial comunitaria es optimista. El comisario europeo Michel Barnier es de los que piensan que estará en vigor durante un breve espacio de tiempo: “Es una restricción en el movimiento (de capitales) que durará sólo unos pocos días”.

Indignación en Moscú

Los primeros perjudicados por esta medida serán los depositantes extranjeros que ahora querrán abandonar los bancos de la isla, o lo que quede de ellos. La mayoría de ellos son rusos. Moscú no ha tardado mucho tiempo en dejar patente su malestar. “Allí, creo que siguen robando lo robado”, ha dicho el primer ministro Dmitri Medvédev, informa la agencia Efe. El presidente ruso, Vladímir Putin, ya había comparado los planes de imponer un impuesto a los depositantes con la confiscación de propiedades por la Unión Soviética.

¿Habrá represalias rusas de algún tipo contra la UE o empresas europeas? De momento, Moscú prefiere tomarse un tiempo para analizar las repercusiones. “Hay que entender en qué terminará esta historia y las consecuencias que tendrá para el sistema financiero internacional y, por tanto, también para nuestros intereses”, señaló Medvédev.

Quien no ha ocultado su satisfacción ha sido el Gobierno alemán. El ministro de Hacienda, Wolfgang Schäuble, ha dicho que el acuerdo final es “mucho mejor” para Alemania que el plan original, que incluía un impuesto del 6,75% a los depósitos inferiores a 100.000 euros. Según Schäuble, el objetivo es reducir el sector financiero chipriota hasta que suponga no más de veces el PIB de la isla. Hasta ahora, sus activos (la mayoría, depósitos bancarios) superaban el 700% del PIB.