La final de la Copa Libertadores supondrá entre 25 y 42 millones de euros para algunos sectores económicos de Madrid

El puente de diciembre es el mejor puente del año para algunos de los sectores que impulsan en mayor medida la economía de España. Es el festivo que marca el comienzo de la Navidad y trae consigo miles de desplazamientos de turistas. En Madrid, la previsión de ocupación hotelera del puente ya alcanza un 79,55%, según cifra la Asociación Empresarial de Hoteles de Madrid (AEHM).

Tras la deslocalización del evento futbolístico del año en Argentina –la final de la Copa Libertadores– a la capital española, las estimaciones de impacto económico se incrementan exponencialmente. La Asociación de Empresarios de Madrid (CEIM) estima un ingreso de 42 millones de euros como consecuencia del partido. “Este evento generará para Madrid ingresos directos e indirectos, por los desplazamientos que se van a producir, e ingresos inducidos”, afirma el presidente de la patronal, Juan Pablo Lázaro.

Dentro de las previsiones, el sector más beneficiado por la llegada de turistas será el hotelero, destaca Jaime Fortuño, profesor de la escuela de negocios EAE. El experto en marketing deportivo cifra el impacto económico derivado del partido en 25 millones de euros. Lo ha calculado basándose en los resultados de eventos deportivos similares como la final de la Champions del año pasado.

“De los 25 millones que se esperan de ingresos, algo más del 50% lo recibirían los hoteles, entre un 20 y un 25% iría destinado al sector de hostelería, un 10% se quedaría en el comercio y el resto en el área de ocio”, sostiene Fortuño.

Madrid Central y el área de Chamartín –próxima al estadio Santiago Bernabéu– serán las zonas con mayor impacto económico. Los hosteleros cifran un millón y medio de euros de impacto económico en estas zonas y estiman un consumo medio de 30 euros por restaurante, afirma a eldiario.es Juan José Blardony, director de la Asociación de Hosteleros de Madrid (La Viña). “No hay antecedentes de algo así en España en un puente de diciembre”, subraya Carmela Rodríguez, vicepresidenta de la Asociación de Empresas de Restauración de Madrid.

Los taxis también tendrán turnos “especiales de refuerzo”. Desde el uno de diciembre, el 100% de la flota está operativa desde las 10 de la mañana del sábado hasta las 8 de la mañana del domingo“, cuenta Jesús Fernández, portavoz de la Federación Española del Taxi.

Desde el Ayuntamiento de Madrid se ha establecido que las licencias pares presten servicio desde las 17.00 horas del domingo 9 de diciembre hasta las 06.00 horas del lunes 10 de diciembre y no podrán permanecer en espera en el Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas durante las horas de refuerzo, indica Marta Alonso, subdirectora de regulación de la circulación

y del servicio del taxi.

Los desplazamientos en avión también se han incrementado desde que se conoce la fecha y la nueva localización de la final de la Copa Libertadores. El siete de diciembre se espera que llegue el grueso de aficionados argentinos a Madrid, ese día Iberia opera dos vuelos –con una capacidad de 359 asientos cada uno– desde Buenos Aires con destino Madrid que ya están completos, explica una portavoz de la aerolínea.

Todos los sectores coinciden en que este acontecimiento es una oportunidad para Madrid, “sobre todo a nivel de proyección internacional”, señala Fortuño. La capital –que acogerá en el Wanda Metropolitano la final de la Champions el próximo junio– “tiene una oportunidad de demostrar que puede gestionar eventos de repercusión mundial con la seguridad adecuada”, añade.

El coste de las entradas: insultante para el aficionado

Las entradas del partido se pusieron a la venta de manera oficial en las taquillas del Bernabéu el pasado dos de diciembre y se agotaron en dos horas. Los precios oscilaban entre 80 y 250 euros frente a los 18 euros de mínimo que tuvieron de coste en Argentina, explica Fortuño.

La organización ha asignado 25.000 entradas para cada club, 12.000 para los socios del Real Madrid y 7.000 para el resto de aficionados. El precio de las entradas en reventa –algo habitual en eventos de grandes dimensiones– puede alcanzar entre los 150 y 8.000 euros en plataformas digitales. “Estos precios son insultantes para la parte social, no puede ser que una entrada nominal se revenda”, lamenta el profesor de la EAE.

“Los precios de reventa están bajando considerablemente”, sostiene un portavoz de Casa Argentina en Madrid, que explica a eldiario.es que el aficionado argentino de clase media que quiera ver el partido en directo tendrá que asumir el coste de desplazamiento y alojamiento en Madrid: “la disponibilidad de tiempo y dinero es limitada, muchos argentinos no podrán desplazarse”.